Desde que se inició el Gobierno de López Obrador se ha estado hablando de la necesidad de formar un bloque opositor lo suficientemente fuerte como para derrotarlo y mandarlo de vuelta a su rancho, el problema es que en honor a la verdad eso no ha ocurrido.
Si bien es cierto que el discurso Presidencial es cada día mas colérico, demencial, fuera de lugar, estruendoso, falto de tacto y plagado de un sinfín de errores de todo tipo, también es cierto que la mal llamada “oposición” no existe, y no han sabido aprovechar esas pifias, nadie o más bien pocos son los que salen a defender o contrarrestar con fuerza el discurso que proviene de Palacio Nacional, tal parece que tienen miedo o andan con la cola entre las patas, sabiendo que para hablar fuerte y tirarle al Presidente, primero deben de tener la cola y las uñas cortas, cosa que la gran mayoría de los políticos de enfrente no tiene.
Así pues, López Obrador se da vida haciendo de las suyas, diciendo lo que le viene en gana todos los días, dividiendo a todo un País, cumpliendo con su objetivo. Hay quienes dicen que la popularidad no es sinónimo de que se tenga a un buen gobernante y menos que esté haciendo bien las cosas, pero como ayuda a ganar elecciones, para muestra un botón chequen lo que paso en el 2021, en donde si bien es cierto no dejaron al partido del Presidente tener la mayoría absoluta en la Cámara de Diputados Federal, pero si llevo Congresos Locales y Gobiernos Municipales, ojo para fines prácticos eso también es control y tener el poder. Aunque también hay que decir que MORENA se ha valido de todas las artimañas posibles para ganar, aprendieron rápido y aprendieron bien, si es que eso es un mérito valido o que se tenga que destacar.
El problema de fondo es que todos en la famosa “oposición” jalan agua para su molino, todos son Generales y todos saben más que nadie en el arte de la guerra, todos se sienten merecedores de llevar la estafeta del líder, ese es el verdadero problema, los egos enormes de quienes pretender formar un bloque mal llamado opositor, que más bien es un remedo de varios partidos que intentan dar la batalla contra un frankenstein mal hecho, convertido en Presidente de México, pero que sin nadie que le haga un frente real, que lo encare valientemente, las posibilidades de ganarle son casi cero, de ahí la enorme preocupación.
El tiempo se agota y las posibilidades de formar un gran frente amplio con todas las fuerzas opositoras se está terminando, más vale que dejen atrás sus grandes EGOS (como ya lo dije) y sus aspiraciones personales o de otra manera estaremos viendo el triunfo aplastante de lo que para muchos ha sido un fiasco como partido, pero que hasta el momento en las urnas la gente les ha respondido, aprovechando sobre todo la enorme desorganización del bloque opositor, las traiciones y el crecimiento en el rechazo para con los partidos tradicionales. En fin, veremos qué pasa, esto se va a poner interesante y color de hormiga. Correo electrónico: bernardobellizzia@hotmail.com