Con Maratón de Cuentos celebran Día Internacional de la Narración Oral

Niñas, niños, jóvenes y personas de hasta 80 años contaron diversas historias durante 12 horas seguidas, durante el II Maratón de Cuentos que el Ayuntamiento de Xalapa y la organización “Cuentos y Flores” realizaron en la explanada del parque Juárez, para celebrar el Día Internacional de la Narración Oral.

A través de redes sociales se convocó de manera abierta a los participantes: más de 60 niños, jóvenes, adultos y personas de la tercera edad se inscribieron para contar historias a alumnos de diez escuelas y población en general que asistieron este martes a escuchar y disfrutar de la magia de la palabra.

A las 9:00 horas comenzó a llegar el público que ocupó su lugar para participar, reír y escuchar las narraciones que efectuaron expertos cuentacuentos, pero también pequeños como Zaid, con apenas seis años, quien venció los nervios y subió a contar “El niño que comía libros”.

“La narración oral es la trasmisión de historias colectivas como la leyenda o el mito, pero también las que han sido creadas por algún autor en específico. Con este maratón nos sumamos al imaginario humano y a la feria de la palabra realizada en más de 25 países del mundo”, dijo el productor del evento, Fernando Licea.

Agregó que en esta edición del Maratón de Cuentos se tuvo una respuesta mayor a la del año pasado, pues se registró 20 por ciento más de afluencia: “Llegó mucha gente, tanto narradores como público; descubrimos que la gente de Xalapa de todas las edades quiere contar. Los niños narran de forma magnífica, los adultos mayores demostraron sus ganas de narrar y escuchar”.

Lorena Álvarez, “Lore de los cuentos”, narradora proveniente de Uruguay, fue la invitada especial en este maratón, quien captó la atención de la audiencia con sus historias sudamericanas.

“Éste es un oficio que te enamora. Cuanto me preguntan por qué me hice narradora, respondo que porque la primera vez que conté un cuento pude sentir esa magia que se da entre la historia y el público. Por ahí dicen que una historia bien contada nunca es indiferente al que escucha”.

“Lore” destacó la importancia de la tradición oral en la vida cotidiana, ya que en su país niños, padres y abuelos siempre contaban historias en la sobremesa: “la ronda del mate, en Uruguay, es un ejemplo”.

En el Maratón de Cuentos participaron niños de tres años e incluso una madre y su hijo contaron una historia a dos voces, en lenguaje de señas; además se narraron historias en lenguas originarias como el náhuatl, con lo que el evento se convirtió en una verdadera “fiesta de la palabra”.