La violencia criminal tiñe de sangre el inicio del proceso electoral de Veracruz.
Eduardo Coronel Chiu
Asuntos Públicos
2021-02-12
El asesinato de Gilberto Ortiz Parra, precandidato del partido Morena a la presidencia municipal de Úrsulo Galván, transportista de 36 años, acribillado en el interior de su vehículo, cuando se dirigía a realizar un acto de proselitismo en la región, es la primera víctima en la competencia electoral y ojalá sea la última.
Aunque ahora se desconoce el móvil del crimen, al igual que la identidad de sus agresores, su participación en la contienda interna del partido Morena y su búsqueda de la alcaldía inevitablemente vincula su crimen a la lucha política.
Junto a las condenas del reprobable hecho por parte de militantes de Morena y las exigencias de rigor de justicia, el protocolo y discurso trillado del gobernador Cuitláhuac García y la Fiscal del Estado Verónica Hernández Giddans no inspiran mucha confianza.
El clima de inseguridad y violencia en el estado es inocultable y preocupante. Ayer mismo, aparte del crimen del precandidato a alcalde, en Orizaba asesinaron a tres policías del estado en una emboscada en las inmediaciones del servicio medico Forense ( SEMEFO) de esa ciudad.
En conferencia de prensa para abordar los dos eventos criminales tanto el gobernador como la Fiscal, tuvieron una actuación acartonada, sin anclaje en la gravedad de los hechos, su discurso, al que solo le cambiaron los datos de los eventos, habrían servido para cualquier otra ocasión. Repiten sin convencer, el mismo libreto gastado de la no impunidad y de que vamos por ellos, con la fuerza de la trilogía- Fiscales, Peritos y Policías- dice la Fiscal como si se refiriera a alguna legión de superhéroes; atacan( los criminales) porque están desesperados, mermados por los operativos.¡ Ya los estamos acabando! eso dicen y ahí siguen.
Concurrentes el día sangriento, los eventos criminales deben separarse, por un lado, la linea del enfrentamiento a grupos delictivos, y por el otro, que si bien no deja de ser ilícito, las agresiones a los actores del proceso electoral.
Debe el Estado garantizar elecciones pacíficas, la integridad física de los participantes, candidatos y ciudadanos, a la vez que la Seguridad Pública en toda la entidad. No bastan los discursos convencionales para salir del paso.
TRANSPARENCIA SIN CREDIBILIDAD
Sabido por todos que su gobierno es opaco e incumple hasta en lo mínimo con la legislación de transparencia y acceso a la información, nadie creyó a Cuitláhuac García su presumido premio de transparencia otorgado al portal de internet Observatorio Veracruzano de Políticas Públicas (OVPP) diseñado por la Oficina del Programa de Gobierno y la Dirección de Innovación Tecnológica de la Secretaria de Finanzas y Planeación (SEFIPLAN)
La burla en las redes sociales se trasladó a la televisión donde la conductora de un noticiero de Televisa ironizó acerca del premio, sugiriendo que se había autopremiado. El contraataque aclaratorio de Cuitláhuac en sus redes exhibió la carta del INAI que efectivamente concede un premio al portal, pero no por transparencia, sino a la ” innovación en transparencia” que suena parecido pero no es lo mismo.
Este premio es específico al diseño del sitio, pero no alcanza a calificar el cumplimiento gubernamental de las obligaciones de transparencia, es decir, nada valora de la calidad y oportunidad de la información que deben hacer pública, especialmente del uso de los recursos financieros, menos al cumplimiento de las solicitudes de acceso a la información.
OBSCURIDAD EN SU CASA
La resistencia y ocultamiento de información del gobierno de Cuitláhuac está acreditada. Su posición quedó definida desde las negativas a abrir voluntariamente aquellos contratos para la compra de patrullas, al inicio de su gobierno, otorgados por el dedazo de la adjudicación directa sin concurso, y la cerrazón a dar a conocer la investigación de la contraloría del estado sobre su señalado nepotismo, el parentesco consanguíneo con su primo hermano, el subsecretario de Finanzas, Eleazar Guerrero.
Asimismo es comprobable la precariedad de la información de las páginas de transparencia del gobierno del estado y su desactualización, así como la constante de negativas a la solicitudes de información. Ahora que el gobierno del estado controla también el Instituto ” garante” del derecho a la información, el IVAI, con la designación de comisionados a empleados de su jerarquía en el Ejecutivo y Legislativo, cierra el círculo de la opacidad.
ENVASE SIN SUSTANCIA
Si se revisa el presumido sitio de innovación transparente, se encuentra una interface atractiva visualmente, pero su contenido es mas de difusión de acciones gubernamentales e ilustraciones turísticas, paisajes y grupos musicales, que de derecho ciudadano a la información.
El sitio es una extensión del programa de gobierno y los informes oficiales, el plan de desarrollo, la agenda 2030, con etiquetas de objetivos y acciones, que además no están desarrollados. Una liga a proyectos, visualiza el mismo esquema de regionalización y obras del informe de gobierno, su buscador lleva a alguna obra y su ficha técnica, en apariencia transparente, sin embargo, omiten especificar la aplicación de recursos, que es lo fundamental. No hay claridad en quién ejecuta la obra y cómo fue que se le adjudicó. Es sitio con potencial de información, susceptible de contribuir a la transparencia, bajo la condición de la apertura y el suministro de los datos que están obligados a ofrecer, y esto es precisamente lo que no hacen.
Es importante la mejora tecnológica de los sitios de información, pero lo es mas el contenido. Es un bonito envase, pero carece de lo sustantivo. No es el observatorio un sitio de datos duros, sino de propaganda institucional.
Sin cumplimiento de las obligaciones de transparencia y acceso a la información, el gobierno de Cuitláhuac García no pasa la prueba de la credibilidad. Por eso la burla a su presumido premio.
Mal signo para el proceso electoral de Veracruz, el asesinato ayer