LAS “BURRADAS” EN MEDICINA DE LA UV DE XALAPA

Pasillos del Poder César Augusto Vázquez Chagoya Leanos en www.pasillosdelpoder.com www.enlaceveracruz212.com.mx vazquezchagoya@prodigy.net.mx 11 de JULIO de 2013

César Augusto Vázquez Chagoya

Pasillos del Poder

2013-07-11

Decíamos que era la columna más difícil que había escrito porque se trataba de jóvenes. Lo sigo sosteniendo, porque de 134 alumnos del décimo semestre sólo aprobaron los campos clínicos 39 y lo reprobaron 95, quienes no merecen estar ayudando en un hospital y entre ellos están 12 que falsificaron sus calificaciones.

La Universidad Veracruzana se rige por su Ley Orgánica y los estatutos para los alumnos, creada por el Consejo Universitario en el 2008 y reformada la última vez el 13 de junio de este año. En estos documentos vienen los castigos a los alumnos desde suspensiones temporales hasta expulsiones definitivas que sólo competen a dicho consejo.

Vamos paso por paso: desde que se supo que 12 alumnos del décimo semestre habían falsificado calificaciones, el caso llegó a la Dirección; y ante la gravedad de la situación (porque los alumnos en este julio iban a estar ya en hospitales) convocó al consejo técnico de la facultad, quienes a la vez convocaron a la Junta Académica integrada por maestros y consejeros alumnos que son los jefes de grupos de la facultad de Medicina de Xalapa.

En esta reunión no hubo quórum, que significa el 50% más uno de alumnos y catedráticos, por lo que no podían poner una sanción por más sencilla que fuera. Tanto los 95 alumnos como los falsificadores, ya se habían salvado.

Aquí empiezan las “burradas”, porque se levantó un acta y en ninguna parte de estatuto de alumnos ni en la Ley Orgánica de la Universidad Veracruzana, se encuentra la obligación de convocar a una segunda sesión de la Junta Académica.

Como en la primera sesión de la Junta Académica --se haya convocado como se haya convocado-- no hubo quórum, ningún alumno podía ser castigado hayan hecho lo que hayan hecho.

Esta primera sesión sin quórum, no es diferente a las que se le realizan a los maestros aglutinados en el FESAPAUV. Hay acusaciones para maestros, se cita a junta de maestros, con fecha, hora y día. Esta debe empezar exactamente a la hora este o no este el acusado, pero si no hay quórum, el caso es desechado aunque el señalado sea culpable.

Así debió pasar con los alumnos de Medicina de Xalapa. He señalado que hay 95 alumnos reprobados en el campo técnico y entre ellos los 12 que falsificaron su calificación. Ninguno merece que estén hospitales para que nos maten a los enfermos.

No habiendo quórum en la primera sesión de la Junta Académica, el caso estaba cerrado, pero como en la UV se mueven las leyes de acuerdo al rector, éste hace un boletín de prensa asegurando que serían tres los castigados en Medicina, sin decir porqué y cuál sería la sanción.

En las leyes civiles nadie puede ser juzgado dos veces por el mismo delito y estos 95 reprobados que ya están en los hospitales atendiéndolo, se les hace otra junta académica, juzgando sólo a los 12 que falsificaron sus calificaciones, dejando fuera a los 95 que habían reprobado. Los volvieron a juzgar por el mismo delito dos veces.

En la segunda junta académica se confesaron los culpables: dos están suspendidos sólo 6 meses de sus derechos académicos; a tres sólo les darán una amonestación por escrito y 7 son inocentes, porque no sabían que habían sido beneficiadas con altas calificaciones ¿Por qué son inocentes, si al ver sus calificaciones, por ética, debieron denunciar los hechos a la dirección?

Estos siete también son culpables, porque como fueron beneficiados, se quedaron callados, y eso aquí y en China es complicidad. En este caso de las falsificaciones, hubo delitos de abusos de confianza y falsificar documentos oficiales.

Usted no lo va a creer. Con el Nuevo Modelo Educativo, impuesto por los rectores Víctor Arredondo Álvarez y Raúl Arias Lovillo, un jefe de área de la facultad de Medicina de Xalapa le entrega las calificaciones al jefe del grupo de los alumnos para que se lo entregue al maestro que le corresponde.

Si el jefe de grupo es ético, entrega las calificaciones tal como lo manda el jefe de área… ¿y si no? Con las manos en la cintura, cambian calificaciones y falsifican firmas, pero lo más canijo es que desde qué año lo están haciendo. Víctor Arredondo fue rector en 1997 hasta el 2004. Raul Arias Lovillo, desde el 2004 hasta este año 2013.

En este caso,donde está en riesgo la vida humana en hospitales oficiales y privados, nos damos cuenta que los integrantes de la Universidad Veracruzana se creen ajenos al pueblo de Veracruz. Se equivocan: se les dio la autonomía para tener libre cátedra y manejaran libremente su presupuesto. No más.

En el caso de Medicina, en donde se cometieron muchas “burradas”, las cosas se lavaron según los intereses de Raúl Arias Lovillo. Se quedó en casa. No se involucró al consejo universitario, integrado por catedráticos y alumnos de los 5 campus en toda la entidad, a pesar de que está en juego la vida humana.

¿Dormirán tranquilos los catedráticos, directivos y el rector de la UV, sabiendo que sus alumnos mal preparados están matando humanos?

Se castigó a 5 de “mentiritas” porque nunca se debió haber efectuado la segunda Junta Académica, y como se cometieron varios delitos, no vemos al Ministerio Público actuando como era la obligación de dar parte a las autoridades universitarias.

Viva la autonomía universitaria de Veracruz, donde son dueños del dinero y de su funcionamiento unos cuántos… ¡Qué daño les hizo la autonomía!

Así que ya saben los dos alumnos suspendidos 6 meses; las tres con amonestaciones por escrito: el que les puede quitar el castigo es el rector Raúl Arias Lovillo, porque nadie puede ser juzgado dos veces.

Ya que se inscribió para ser nuevo rector de la UV, Víctor Arredondo Álvarez, el que está contento es el del bar Godos en Murillo Vidal, que al parecer vienen los felices tiempos donde cantaba y bailaba Arredondo y al irse escogía a la alumna que se iba a llevar.

Víctor Arredondo Álvarez, por más prensa que pague, le va a salir pus en sus aspiraciones a ser de nuevo rector de la Universidad Veracruzana.