+ El presidente francés, François Hollande y 19 líderes mundiales, entre ellos Vladimir Putin, Barack Obama, y la reina Isabel, se reunieron en el cementerio de Colleville-sur-Mer.
Internacionales
MILENIO - 2014-06-06
El presidente de Francia, François Hollande, encabezó este viernes los actos conmemorativos del 70 aniversario del Desembarco de Normandía, a los que asisten 19 jefes de Estado y de gobierno.
El mandatario francés pronunció un discurso pacifista en el Memorial de Caen, donde rindió homenaje a las fuerzas aliadas, a la resistencia y a los civiles que perdieron la vida durante la Segunda Guerra Mundial.
Recordó que el 6 de junio 1944 marcó el inicio de una de las batallas más feroces de la historia de Francia, que costarían la vida a más de 110 mil personas, entre ellas más de 20 mil civiles.
"Porque Francia conoció la barbarie, hace todo por preservar la paz en todas partes, en África y en las puertas de Europa", dijo el jefe de Estado, en referencia a las intervenciones militares de tropas francesas en Mali y en República Centroafricana y a los intentos de París por evitar un conflicto armado en Ucrania.
Hollande aseguró que ese compromiso de su país con la paz responde al "deber de ayudar a los que sufren", por respeto a la memoria de quienes liberaron Francia de la ocupación de la Alemania nazi.
Posteriormente, el presidente Hollande y su homólogo de Estados Unidos, Barack Obama, observaron un minuto de silencio en el cementerio de Colleville-sur-Mer, cerca de la playa de Omaha, donde están enterrados más de 10 mil soldados estadunidenses.
La ceremonia principal tendrá lugar este viernes a las 14:15 horas locales (12:15 GMT) en Ouistreham, a la orilla del mar, donde se registró una de las primeras batallas por la liberación de Francia y Europa de la ocupación nazi.
En ese acto se espera la presencia de 19 jefes de Estado invitados, entre ellos la canciller federal alemana Ángela Merkel, los presidentes Barack Obama y de Rusia, Vladimir Putin, así como el presidente electo de Ucrania, Petro Poroshenko, y el primer ministro británico David Cameron.