La mitad de duartistas, presuntos corruptos

Algunas gotas de fino humor para iniciar la semana, a propósito de que el sábado pasado se cumplieron 40 años de la muerte de Groucho Marx, uno de los cómicos más icónicos del mundo, como lo calificó en el subtítulo de su nota el diario El País: “Hijo mío, la felicidad está hecha de pequeñas cosas: Un pequeño yate, una pequeña mansión, una pequeña fortuna…” y “Es mejor estar callado y parecer tonto que hablar y despejar las dudas definitivamente”. Para quienes no se acuerden o lo ignoren, él fue el autor de una frase que hasta la fecha provoca el rechazo de las mujeres: “Detrás de cada gran hombre hay una gran mujer. Detrás de ella, está su esposa”. Pero también acuñó estas otras: “La política es el arte de buscar problemas, encontrarlos, hacer un diagnóstico falso y aplicar después los remedios equivocados”, y esta otra: “¡Oh! Nunca podré olvidar el día que me casé con aquella mujer... Me tiraron píldoras vitamínicas en vez de arroz”, y una más: “Yo no soy vegetariano, pero como animales que sí lo son”. Groucho fue el que dijo que sólo lo barato resulta caro. Pero basta.
Aunque, ¡ay!, me pega la nostalgia con la muerte de otro cómico leyenda norteamericano: Jerry Lewis. Tenía 91 años y falleció ayer en su casa de Las Vegas por causa de muerte natural. Cinéfilo que fui desde niño (se acababa de inventar la televisión, pero se veía sólo en algunas partes de la Ciudad de México y pasaría mucho tiempo para que se desarrollara y se extendiera a todo el país, de tal forma que el cine era la única diversión que existía), prácticamente vi todas sus películas pero hubo dos que se volvieron inolvidables para mí: El profesor chiflado y El botones. Nunca en mi vida conocí a alguien más que convirtiera una sala de cine en un manicomio de risa como lo viví en el entonces Cine Auditorio Municipal de Coatzacoalcos, recién inaugurado a principios de los años 60 y que ya derrumbaron.
¿Perseguidos políticos?
Pero, ni modos, aterricemos en nuestra realidad. El todavía gordo Javier Duarte se declaró en huelga de hambre y dice que lo persiguen políticamente a él y a sus acólitos que lo ayudaron a saquear al Estado y a llevarlo a la peor crisis de su historia. Pero de inmediato Jair Ávalos, el corresponsal en el puerto jarocho del portal ejecentral, documentó y recordó que al menos la mitad de funcionarios duartistas están acusados de actos de corrupción por parte de la Auditoría Superior de la Federación (ASF), incluidos excolaboradores de Fidel Herrera Beltrán.
El joven periodista apuntó que cuarenta y dos funcionarios públicos y dos empresas lograron desaparecer más de 37 mil millones de pesos, provenientes de fondos federales y destinados a programas de salud, educación, seguridad e infraestructura, de tal forma que el dinero que debía utilizarse en aulas, becas, hospitales y equipo de seguridad simplemente se esfumó.
Anota el trabajo periodístico que la ASF ha presentado hasta ahora 52 denuncias (que suman un posible daño al erario público por casi 45 mil millones de pesos) ante la Procuraduría General de la República (PGR) contra el último año de administración de Fidel Herrera (2010) y los primeros tres de Javier Duarte en Veracruz (2011-2013), es decir, que aún faltan las denuncias de los últimos dos años fiscales, por lo que el monto se incrementará en los próximos meses.
“En las primeras 45 querellas, de las que ejecentral tiene copia, suman 37 mil 237 millones 892 mil 412 pesos del monto total del presunto daño causado, y en ellas se señala, con nombre y apellido, a los personajes que la ASF ubica como responsables del desfalco a las finanzas públicas”.
De esa lista, se continúa diciendo, 12 son funcionarios veracruzanos muy cercanos al grupo político de Fidel Herrera y al de Duarte, y con cargos de primera línea; el resto son servidores públicos de menor perfil, pero ubicados en áreas clave, desde donde era posible articular el desvío de los fondos presupuestales.
Anota que entre el 16 de febrero de 2012 y el 14 de junio de 2016, el órgano auditor presentó las primeras denuncias penales por la malversación de 16 fondos federales, o sea, desde el último año del gobierno de Felipe Calderón y hasta la fecha la PGR acumuló pruebas contra la administración de ambos exgobernadores sin que haya procedido penalmente en su contra hasta mediados de 2015, cuando las investigaciones avanzaron hasta obtener, casi un año después, en 2016, la primera orden de aprehensión en contra de Duarte y una decena de sus colaboradores.
O sea que si se actúa de veras habrán de caer muchos más exfuncionarios pillos. ¿Perseguidos políticos?
Lo único triste es que hasta la fecha todo es un circo mediático y no se ha recuperado nada, ni un sólo quinto, y lo que hay es porque algunos delatores devolvieron parte de lo que se habían llevado.
Dante, nada hasta ahora con Morena
Hasta anoche, nada, ninguna plática ni ningún acercamiento había ocurrido entre el exgobernador Dante Delgado Rannauro y Morena, es decir, Andrés Manuel López Obrador, con miras a que el dirigente nacional de Movimiento Ciudadano (MC) se convirtiera en el candidato a gobernador de la izquierda en Veracruz. Fuentes de MC en el altiplano me aseguraron que la soberbia del tabasqueño sigue impidiendo cualquier intento aunque ellos están abiertos al diálogo.
Me remitieron al comunicado de MC del pasado 4 de agosto en donde se informa que la Comisión Operativa Nacional (el equivalente del CEN del PRI) aprobó dialogar con organizaciones electorales y convocar a la construcción de un Frente Ciudadano por México, que construya una mayoría que evite la pulverización del voto en 2018 y que haga posible un cambio de régimen con los ciudadanos en el centro de las decisiones y por encima de los partidos.
O sea, están en pláticas con otros actores políticos y otras organizaciones políticas, pero hasta ahora, con Morena nada, de tal forma que las declaraciones que han hecho en Xalapa el dirigente estatal Manuel Huerta y el diputado federal y excandidato a gobernador Cuitláhuac García son meras buenas intenciones, pero nada más.
Por eso tomo con reserva la información que obtuve el sábado de una fuente cercana a la también diputada federal Rocío Nahle, de que para 2018 el candidato a gobernador por Morena sería Dante y los candidatos a senadores, Rocío y Cuitláhuac.
Una cosa se me dejó muy en claro en MC: sin embargo, de aquí al 15 de noviembre cuando habrá candidatos porque el 25 de ese mes deberán quedar registradas las coaliciones que participarán en el proceso electoral, todo puede pasar, lo cual es cierto.
Si eso fuera, en Morena habría un buen producto y una buena marca, mientras que en el PRI con Pepe Yunes habría muy buen producto con muy mala marca y en el PAN una marca aceptable pero un producto poco atractivo.
Mala relación Iglesia-Estado
Enérgico, duro el boletín dominical de la Arquidiócesis de Xalapa ayer contra el Gobierno del Estado, que necesariamente toca al gobernador Miguel Ángel Yunes Linares.
Implícitamente acusa al panismo en el poder que está instrumentando “ataques a las instituciones familiares desde varios frentes, pues ahora, a través de una reforma integral del Código Civil y con la farsa de una consulta ilegal se pretende prácticamente legalizar el asesinato de los niños, vaciar de contenido la institución familiar con el divorcio incausado y lastimar la institución del matrimonio natural”.
Acusa que: “El Estado de Veracruz pasa por una crisis muy severa. Los grandes problemas de violencia, pobreza extrema, atención en el cuidado de la salud y desempleo no se ve para cuando tengan una respuesta efectiva que ofrezca tranquilidad y esperanza a la gente”, y agrega que, para colmo, ahora la reforma al Código Civil.
Para la Iglesia, desde el Plan Veracruzano de Desarrollo se planeó en forma “perversa… una auténtica amenaza para las familias y las personas veracruzanas”. ¿Con la Iglesia hemos topado, Sancho?