INMUNIDADES
Juan Antonio Nemi Dib
Juan Antonio Nemi Dib
Cosas Pequeñas
2012-01-30
Según narra la página web oficial de la organización ‘Las Abejas’, “el 22 de diciembre de 1997, un grupo de tsotsiles equipados con armas de grueso calibre dispararan en contra de 45 personas abejas (18 mujeres adultas, cinco de ellas con embarazos hasta de 7 meses de gestación; 7 hombres adultos; 16 mujeres menores de edad, entre los 8 meses y los 17 años de edad; 4 niños entre los 2 y los 15 años de edad) e hirieron a 26, en su mayoría menores de edad, varios de ellos resultaron con lesiones permanentes."
Y explica: “Las personas atacadas se encontraban refugiadas en la comunidad de Acteal debido al continuo hostigamiento de grupos armados que quemaban sus casas y cultivos, y robaban sus pertenencias. Estaban completamente desarmados, realizando una jornada de ayuno y oración en la capilla de la comunidad de Acteal para pedir por la paz en la región.”
Hay versiones contrapuestas sobre esta masacre. De un lado se afirma que los hechos fueron producto de una estrategia contrainsurgente promovida desde el Gobierno con el fin de “matar al pez quitándole el agua”, es decir, desarticulando las bases sociales del Movimiento Zapatista, mientras que por otro lado se asegura que los hechos fueron resultado de los frecuentes conflictos étnico-religiosos que en distintos momentos han producido incidentes similares, aunque no de esta intensidad.
En 2007, la Suprema Corte de Justicia de la Nación admitió la solicitud de amparo de los indígenas procesados como responsables de la matanza y, finalmente en 2009, ordenó su inmediata libertad. De modo que, hasta este momento, no hay, formalmente, ningún responsable por los muertos.
El periódico Milenio de Ciudad de México informó recientemente que el ex presidente de la República, Ernesto Zedillo, fue demandado en una corte federal de Connecticut, Estados Unidos, como presunto responsable de “crímenes de guerra y otros de lesa humanidad”. Según la nota, el demandante sería el bufete de abogados de Miami Rafferty Kobert Tenenholtz Limited y Hess; ellos afirman que el hoy maestro de la Universidad de Yale “apoyó la formación y enfrentamiento de grupos paramilitares por parte de las fuerzas armadas mexicanas”.
Originalmente, en un primer comunicado, Zedillo afirmó que las imputaciones en su contra “no sólo son falsas sino calumniosas” y dijo que respondería oportunamente en los tribunales, apenas fuese notificado del asunto. Pero no se ha producido tal respuesta, por lo menos no públicamente.
Sin embargo, para sorpresa de muchos y de acuerdo con El Universal, “El Gobierno de México a través de la Secretaría de Relaciones Exteriores invocó la inmunidad soberana que prevé le ley en Estados Unidos a favor del ex presidente Ernesto Zedillo, a fin de que se deseche una demanda que se presentó en su contra en una corte estadounidense por la masacre de indígenas de Acteal...”. Fue precisamente con este argumento que los abogados de Zedillo pidieron al Departamento de Estado que se pronunciara sobre la supuesta inmunidad legal que el ex presidente mexicano tiene en los EUA, gracias a la “Ley de Inmunidad de Soberanía Extranjera” que impide a los jueves de Estados Unidos someter a juicios penales, mercantiles y financieros a gobiernos y gobernantes extranjeros.
Por eso llamó enormemente la atención el que el pasado jueves, durante su presentación en el Foro Económico Mundial de Davos, en Suiza -en la mesa que compartió con Bill Gates-, Felipe Calderón hablara elogiosamente de Zedillo; palabras más, palabras menos, Calderón dijo: “En la crisis del 95, México era una Nación solvente, pero carecía totalmente de liquidez. Para enfrentarse a esta situación, el Presidente Zedillo, miembro del Foro Económico Mundial, implantó un ajuste severo a nivel fiscal a pesar de los costos sociales y políticos.”
Y esto es especialmente notable cuando la apología provino de quien ha sido uno de los mayores detractores de los gobiernos priístas en general y de Zedillo en particular, a quien más de una vez responsabilizó -su delfín, Ernesto Cordero, no deja de repetir machaconamente el argumento- de todos los males posibles y acusó enérgicamente de todas las fallas y maldades imaginables.
Repentinamente, de ser maligno, Zedillo se convirtió a los ojos del Presidente Calderón en el salvador de la economía nacional, cuyo ejemplo debiera seguirse ahora por las naciones europeas. Y, entre bromas-veras, el propio Ernesto Zedillo lo significó, como reporta el diario La Crónica:
“Cuando yo era presidente de México (de 1994 a 2000), el presidente Calderón era realmente un líder de la oposición, porque era el líder del principal partido de oposición y era un gran líder de su partido, pero era muy duro, muy difícil.” Y le preguntó a su sucesor: “¿Qué se siente lidiar con la oposición?.” A la pregunta formulada por el ex presidente Zedillo, Calderón respondió: “Bueno, pues debo decir que me siento muy cómodo. Alguien dijo que estar en la oposición es como estar en el cielo, pero cuando estás gobernando, estás en el infierno. Pero lo importante es que me siento muy cómodo con la oposición, porque han tenido una actitud muy responsable”.
En cualquier caso es bueno que Calderón y Zedillo -que pronto serán colegas ex presidentes- se hagan cuates. Tal vez Ernesto tenga que recomendarle a Felipe algunos procedimientos legales a propósito de la inmunidad.
antonionemi@gmail.com