Los Yunes, de todos modos puntean

(Abro la semana expresando mi felicitación a todos los amigos de Notiver, que el viernes cumplió 40 años. En especial a su director, Alfonso Salces Fernández, quien generosamente me mantiene abiertas las páginas de su diario. Un abrazote a todos, larga vida y mucha salud.)
(El presidente Peña Nieto no viene al tradicional acto agrario del 6 de Enero próximo (dentro de 22 días). Irá a Washington para reunirse con el presidente Barack Obama. Será un acto totalmente desangelado.)
En 1980, cuando se acercaba el relevo del gobernador Rafael Hernández Ochoa, el entonces presidente José López Portillo encontró el relevo natural en su entonces secretario de la Reforma Agraria, Gustavo Carvajal Moreno, oriundo de los Tuxtlas, quien ya había sido dirigente nacional del PRI, y cuyo padre, don Ángel Carvajal Bernal, ya había sido también gobernador.
Pero estando ya cercano, igualmente, el cambio en la Presidencia (en 1982), Carvajal, hombre cercanísimo y de todas las confianzas de Jolopo y con una gran presencia en el escenario político nacional de entonces, se creyó presidenciable y rechazó la invitación que le hacía su amigo para venir a gobernar Veracruz. Decidió esperarse para buscar la Presidencia (entonces el “mejoral” para el dolor de cabeza de López Portillo resultó don Agustín Acosta Lagunes: “si Veracruz es tu dolor de cabeza, aquí está tu mejoral”).
No llegó a Los Pinos y a partir de entonces buscó por todos los medios lo que cuando ya tenía en sus manos rechazó: la gubernatura. Yo recuerdo que cuando se acercaba el relevo de Patricio Chirinos Calero, alguna vez le llamó por teléfono al entonces director del diario Política, “Yayo” Gutiérrez Castellanos, para pedirle que lo ayudara con comentarios. “Ya he sufrido mucho, Yayo, ayúdame”, le dijo. Le ofreció que si llegaba sería recíproco. Nunca logró ser gobernador. Hoy deseo que esté bien de salud (el año pasado tomamos café en el puerto de Veracruz junto con Carlos Brito Gómez, Gonzalo Morgado Huesca y Guillermo Zúñiga Martínez e hicimos muchos recuerdos).
Con su caso se demostró el dicho de que más vale pájaro en mano que ciento volando.
Independientemente de la duración del periodo de la próxima gubernatura, que sería por una sola vez sólo para homologar las elecciones locales con la de presidente, si los aspirantes y contendientes decidieran seguir como han ido hasta ahora, los Yunes: Héctor, Pepe, Miguel Ángel y Fernando continúan a la cabeza de la preferencia ciudadana, los dos primeros priistas, los dos últimos panistas.
Aparte de que algo extraordinario pudiera llegar a pasar, como que del centro del país pidieran al gobernador Javier Duarte de Ochoa que reconsiderara su iniciativa por alguna razón de mucho peso político, casi estamos en las mismas: en el caso de los priistas, los senadores continúan disputando el poder al grupo fidelista-duartista, si bien Javier Duarte de Ochoa ha dicho que no tiene candidato.
Hasta antes del pasado miércoles 10 de diciembre cuando el secretario de Gobierno, Erick Lagos Hernández, hizo el gran anuncio de la iniciativa de Reforma Político-Electoral que contiene como cereza del pastel una gubernatura de sólo dos años (2016-2018), los senadores priistas –Pepe casi siempre con un buen pretexto relacionado con su función legislativa, Héctor en forma totalmente abierta aunque últimamente se había refrenado por una sentencia de la Corte que castiga las precampañas antes del periodo legal– estaban recorriendo el estado manteniendo una gran presencia entre el electorado y a la vez sumando.
De los dos, Yunes Zorrilla siempre ha venido diciendo que todavía no son los tiempos políticos y en todos sus mensajes ha dado créditos al presidente Peña Nieto y al gobernador Duarte, mientras que Héctor desde un principio ha proclamado no sólo que va arriba en las encuestas y que no sólo es aspirante sino que va a ser el candidato y el próximo gobernador, e incluso ha hecho señalamientos directos a Duarte de Ochoa de estar obstaculizando su trabajo de proselitismo en la entidad.
Sin embargo, el viernes, el columnista de Excelsior, Francisco Garfias, especializado en asuntos parlamentarios, dio a conocer el resultado de una encuesta que realizó la Universidad Veracruzana (antes se había conocido otra realizada por la empresa Parametría, y se sabe que está por darse a conocer una de Mitofsky), en la que Pepe Yunes les saca una gran ventaja a los demás contendientes.
Pancho Garfias apuntó: “Veracruz es uno de los nueve estados donde habrá elecciones para gobernador en 2016, pero los aspirantes ya se mueven como si fueran en el 2015. Las encuestas van y vienen. Las precampañas disfrazadas también. En manos de este reportero cayó una realizada por la Universidad Veracruzana”.
Cito: “La citada encuesta dice que las preferencias electorales las encabeza el senador del PRI, Pepe Yunes Zorrilla. Entre nueve candidatos es el mejor ubicado. A la pregunta, ¿cuál de ellos sería un buen gobernador de Veracruz?, el 11.6% dio ese nombre.
Atrás vienen los panistas Miguel Ángel Yunes Linares, 8.6; y Miguel Ángel Yunes Márquez, 6.6 por ciento. Le sigue el priista Héctor Yunes Landa, 6.2 por ciento; Juan Bueno Torio 5.3 por ciento; el panista Julen Rementería, 4.7 por ciento; el secretario de gobierno, Erick Lagos (delfín del gobernador) 4.7 por ciento; y el perredista Elías Moreno Brizuela”.
Algo que llama la atención es una mención que hace el columnista: “En los pasillos se menciona el nombre del expanista Gerardo Buganza, quien dejó ese partido por los malos tratos que recibió de Felipe Calderón” (en realidad, de acuerdo a encuestas, del gabinete Buganza es el mejor posicionado).
Garfias destacó un hecho: “Pero la respuesta que se llevó el más alto porcentaje fue ‘ninguno de ellos’: 46.6 por ciento”. Remató: “En otras palabras, hay espacio para otros aspirantes”. ¿El almirante Saynez?, pregunto yo.
En todo caso, la diferencia porcentual entre Pepe y Erick, que serían los representativos de los dos grupos, es de 7 puntos. Entre Pepe y Héctor, de poco más de 5 puntos.
En la de Parametría, que los actores directamente citados toman con pinzas porque aducen que se trucó para posicionar a Erick, ya que el joven Fidel Herrera Borunda es socio de la empresa, de todos modos Pepe Yunes aparece también en la punta.
Cuando se pregunta a la población general, ¿por cuál de los siguientes candidatos votaría usted?, Pepe aparece con 15% mientras que Erick ¡con 14%!, Héctor con 11% y Alberto Silva Ramos con 7% (nótese que sólo aparecen esos cuatro nombres, o sea, dos contra dos). Aquí también es mayoritario el porcentaje que dice por ninguno: 24%.
Pero cuando la misma pregunta se la hace sólo a los priistas: ¿por cuál de los siguientes candidatos votaría usted?, Héctor se va arriba con 21%, Pepe lo sigue con 20% (prácticamente un empate técnico), Erick mantiene su 14% y Alberto su 7%.
Cuando ponen al también senador Fernando Yunes Márquez, del PAN, contra su tío Héctor Yunes Landa, del PRI, éste obtiene 24% contra 23% de su sobrino, o sea, mantienen empate técnico.
Cuando contraponen a Fernando con su tío putativo José Francisco Yunes Zorrilla, éste obtiene 26% contra 22% de su joven pariente.
Una pregunta me hizo ruido. Se le cuestiona al electorado si preferiría que el próximo candidato tenga o no el apoyo del gobernador. ¿Qué cree? Que la respuesta que sí: 46% preferiría que estuviera apoyado por Javier Duarte y 42%, que no.
Está por conocerse en cualquier momento una tercera encuesta, de Mitofsky, que estaría patrocinada por el exgobernador Fidel Herrera Beltrán, según los enterados, y en la que todos esperan que, nuevamente, Erick salga muy bien posicionado.
No se sabe por ahora si los senadores, que están embalados, van a bajarle el ritmo a sus recorridos, si los van a mantener al mismo que han llevado o si los van a intensificar. Tampoco si el presidente Peña dejará que Duarte proponga e imponga candidato, o si va a ser mano, como siempre lo han sido los presidentes, y si a los legisladores de la Cámara Alta sí les interesa de todos modos diputar la gubernatura de dos años y dar la pelea al grupo en el poder. Si se abrieran le dejarían toda la cancha al gobernador y acaso nunca más, como a Carvajal, se les presente la oportunidad de tener muy cercana, casi en la mano, la silla principal del Palacio de Gobierno y las llaves de la Casa Veracruz.
Ya en el mero terreno de la especulación: por fuera, el comentario es que de los cuatro Yunes: Pepe, Héctor, Miguel Ángel y Fernando, los cuatro punteros, si jugaran, con el que menos mal les iría a los actuales sería con el de Perote, pues los últimos tres llegarían con ánimo de meter a más de uno a prisión, además de que llegarían a ajustar cuentas políticas. Por lo pronto, Fernando ha declarado ya que sea de dos, de cinco o de seis, él y su padre sí van a participar. En 2016, sin duda, va a haber un baño de sangre… política.
Pero como a la piñata no le pueden faltar los trozos de caña, los tecojotes, la colación, los cachuates, el confeti, la serpentina, los gorritos y la sidra para las posadas que comienzan mañana, el sábado el diario Reforma publicó en su columna “Templo Mayor” que: “Todavía no se concreta la reforma, pero ya hay candidato.
“Allá en Veracruz, el gobernador Javier Duarte promueve la instauración de un gobierno de sólo dos años, a fin de emparejar el calendario electoral estatal con el federal.
“Y en Xalapa se dice que quien quedaría al frente de esa mini gubernatura sería el vocero estatal, Alberto Silva, graaan cuate de Duarte.
“Esa es amistad y no la de las películas de Pedro Infante y Luis Aguilar”.
¿Fidel empujando en las encuestas a Erick y Javier a Alberto en las columnas de altos vuelos? ¿Primero van a eliminar a los Yunes y luego ellos se echarán un tirito para ver quién llega finalmente?
En dos días más, quienes tenemos derecho a ello en nuestros centros de trabajo, nos vamos de vacaciones. Tema político habrá suficiente para las mesas de brindis navideño y fin de año. Buen provecho.
Américo rinde informe
El alcalde de Xalapa, Américo Zúñiga Martínez rinde su primer informe este lunes. Será a las siete de la noche en el Teatro del Estado. Este joven presidente municipal realizó durante el año más de 500 obras materiales, de las cuales dará cuenta en forma detallada. Un buen alcalde, sin duda.
El jueves también rindió el suyo otro joven presidente que rebasó su metas plateadas: el de Boca del Río, Miguel Ángel Yunes Márquez, quien, igual, realizó bastante obra.
Juan Manuel del Castillo
Los meses de noviembre y diciembre han sido determinantes para la gestión del gobernador Duarte. Justo en este lapso, Veracruz fue foco de atención a nivel nacional e internacional por haberse desarrollado de manera exitosa los Juegos Centroamericanos y del Caribe y la Cumbre Iberoamericana, la primera vez que históricamente una entidad del país ha sido al mismo tiempo y en fechas muy cercanas sede de tan importantes acontecimientos.
No es un área de lucimiento, pero sí de mucho trabajo la Oficina del Gobernador, donde bajo la responsabilidad directa del secretario particular, Juan Manuel del Castillo, se tuvo el enlace con los comités organizadores e hizo posible una excelente coordinación, con los resultados que ya se conocen. Es de reconocerse que sin estar expuesta mediáticamente dicha área, trabaja de forma eficiente como se esperaría que trabajaran todas.
La flor de Julen para Noemí
Antes que se haga viejo el detalle, me llamó la atención la flor que le lanzó el excoordinador del Grupo Legislativo del PAN, Julen Rementería del Puerto, a la secretaria de Protección Civil, Noemí Zoila Guzmán Lagunes, durante su comparecencia el 9 de diciembre pasado.
Según un boletín que hizo circular, Julen pidió al gobernador considerar mayor participación de las mujeres en la administración pública y dijo que “el reconocimiento hacia la única mujer que ocupa una secretaría en el gabinete estatal, por parte de todas las fuerzas políticas representadas en la LXIII Legislatura, sienta un precedente sobre el trabajo realizado desde esta dependencia”. Incluso pidió paridad en los nombramientos del gabinete.