Duarte vs Miguel Ángel
Aun en el desenlace de su gobierno, Javier Duarte de Ochoa mantiene acorralado a Miguel Ángel Yunes Linares.
Sin duda.
De manera habilidosa, Duarte se encuentra ejecutando maniobras legales que harán que el panista haga uso hasta de su imaginación para librarse de ellas.
Es cierto, hasta los coches tienen reversa.
Sin embargo, será muy difícil que en la próxima legislatura todos los diputados se pongan de acuerdo para tumbar las reformas y nombramientos que este congreso realiza, donde el PRI tiene mayoría.
Ya que si los próximos diputados panistas y perredistas pretenden acordar con los de MORENA, primero tendrán aprobar la iniciativa de reducirse el sueldo a la mitad, y allí estará cabrón.
Es un casi un hecho, Portilla Bonilla será el fiscal anticorrupción de manera inamovible, mientras que no hay vuelta atrás para que Gabriel Deantes Ramos llegue al IVAI.
En fin, el gobierno Duartista poco o casi nada le dejará al azul.
La mera verdad.
Sin ser lo políticamente correcto, la administración estatal de manera natural está blindando su seguridad y de paso solidifica a diversas instituciones con presupuestos como el del 4 % a la Universidad Veracruzana o el 1.5 % al Tribunal Superior de Justicia.
A como van las cosas, poco o nada le dejarán para actuar a Miguel Ángel, ya que el próximo gobierno no tendrá capacidad financiera paras cubrir todas sus obligaciones. Y si le agregamos el rumor de que se basificarán a empleados de gobierno desde subdirectores para abajo, caeríamos en el supuesto de que la siguiente administración no tendrá los suficientes recursos para cubrir sueldos y prestaciones.
Hay que decirlo, al convertirse en gobernador constitucional Miguel Ángel Yunes Linares tendrá que hacer magia para honrar a su palabra, ya que aparte de de tener dobladas las manos en relación a la ejecución administrativa, son los mismos politólogos quienes apuestan doble contra sencillo a que no cumplirá con la demagógica promesa de meter a Duarte de Ochoa a la cárcel y este será el principio del fin.
A Yunes Linares no le alcanzará el tiempo.
Miguel Ángel irá contra reloj y serán tan solo 730 días.
Con lo anterior, o el choleno centra toda su capacidad para un reordenamiento financiero o de plano continúa con el estéril debate mediático que solo lo desgastará aún más.
Y es que aun con todas las conferencias o desplegados, Miguel Ángel Yunes será gobernador hasta el primero de diciembre, no antes, ni después.
No cabe duda que en el ocaso de su gobierno Javier Duarte está ganando las batallas.
Ya veremos pues que pasa con el round final.
@IvanKalderon
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