Los PRImates en el poder

2014-04-04

Todos los mexicanos sabemos de la corrupción imperante en nuestro sistema político. Por décadas, quienes han logrado llegar al poder –desde más pequeño eslabón hasta los individuos que ocupan los más altos peldaños- en cuanto tocan “baranda” instauran las mil y una forma de cómo aprovecharse de la gran oportunidad de sus vidas: robar. Por ello, el “poder” se ha convertido en la expectativa más añorada de un reducido sector de la población, esos mismos que vemos cómo directores, mañana como alcaldes, pasado cómo gobernador y hoy como presidente de la República. Son tan reciclables, que se retiran del “añorado poder” y se convierten en los asesores de quienes gobiernan, pero siempre con la firme convicción de vivir a costillas de los ciudadanos.

Cómo gobernados hemos constatado los diversos mecanismos que ejecutan nuestros gobiernos para enriquecerse indebidamente. Durante 80 años el Partido Revolucionario Institucional (PRI) y 12 con Acción Nacional (PAN), instauraron casi similares acciones para poder llevar “agua a su molino”. La diferencia entre una y otra corriente en su paso en el poder, se centra únicamente en el color de sus siglas.

Penosamente los mexicanos podemos advertir que no existe una sola acción por parte de los servidores públicos que puedan hoy en día sorprendernos con relación a sus actos de corrupción. Hasta podemos “presumir”, haber observado de todo por parte de los políticos, es por ello, que la red de prostitución constituida por el ex “pepenador” y recolector de desechos, mejor conocido como “El rey de la basura” -quien se ostentaba como presidente del PRI en el Distrito Federal- Cuauhtémoc Gutiérrez de la Torre, no provoca ningún tipo de sorpresa. Podemos advertir que quien logró nuestra ferviente admiración, es quien es considerada como una de las mujeres más emblemáticas en el periodismo mexicano, Carmen Aristegui, quien junto con su equipo de trabajo, lograron echarle abajo al ex líder priísta, su red de prostitución.

Sobre el tema, nos salta una serie de cuestionamientos que debieran ser atendidos por parte de las autoridades y de no hacerlo, pues confirmarán la sospecha que existe con relación a su complicidad en el asunto. Cuántos de los ahora instalados en el poder, no habrán hecho uso de las “edecanes de imagen” que dicho dirigente mantenía con el presupuesto destinado al partido del tricolor.

Lo triste de todo este entrampado, es que cómo siempre la impunidad se hace vigente para quienes gozan de un puesto de relevancia en el esquema político imperante.

Cómo muestra un botón, es la denuncia realizada por parte del creador de la Unidad de Investigación de Delincuencia Organizada perteneciente de la Procuraduría General de la República (PGR), Samuel González Ruiz, quien aseguró que la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión, envió a los senadores una minuta para derogar el artículo 19 del Código Penal, en donde se tipifica como delito grave la trata de personas. Argumentó que de hacerlo, el acto de corrupción de Gutiérrez de la Torre, podría jamás ser castigado. Es decir, nuevamente el “manto legislativo” vuelve a activarse. Para eso sirve su paso en la curul, para servirse y proteger sus propios intereses.

Dicho artículo a la letra dice:

“Será sancionado con pena de 5 a 10 años de prisión y de 4 mil a 30 mil días multa, el quecontrate a una persona u oferte un trabajo distinto a los servicios sexuales y la induzca a realizarlos, bajo engaño en cualquiera de las siguientes circunstancias:
I.Que el acuerdo o contrato comprende la prestación de servicios sexuales; o

II. La naturaleza, frecuencia y condiciones específicas; o

III. La medida en que la persona tendrá libertad para abandonar el lugar o la zona a cambio de la realización de esas prácticas; o

IV. La medida en que la persona tendrá libertad para dejar el trabajo a cambio de la realización de esas prácticas; o

V. La medida en que la persona tendrá posibilidad de salir de su lugar de residencia a cambio de la realización de esas prácticas; o
VI. Si se alega que la persona ha contraído o contraerá una deuda en relación con el acuerdo: el monto, o la existencia de la suma adeudada o supuestamente adeudada”.

Con esta pretensión, se puede constatar nuevamente el complot político que se sustenta en el país. No nos extraña en lo absoluto ver cómo –sea del que sea, cualquier partido político- la forma como se encubren unos a otros con la finalidad que sus actos ilícitos queden sin castigo.

Dicta un conocido dicho popular: “Qué para tener la lengua muy larga, se debe de tener la cola muy corta” y lamentablemente ninguno de los que viven enquistados en el poder, pueden sentirse a salvo en ese tenor. Absolutamente todos los que ostentan un puesto en los tres niveles de gobierno –ejecutivo, legislativo y judicial- pueden enorgullecerse de su “ética” y “rectitud”. Ante la posibilidad de ser evidenciados ya sea por su co-participación directa o indirecta en algún ilícito o por haber disfrutado de él, su postura natural es el de proteger al “árbol caído”, pues evidentemente, ponen sus “barbas a remojar” y saben que mañana podrían ser ellos quienes estuvieran en el banquillo de los acusados.

El PRI sabe que este desprestigio a causa del ex dirigente del PRI-DF, Cuauhtémoc Gutiérrez de la Torre no le mueve ni un solo cabello con relación al 2015. Si nos ponemos analíticos, el tricolor siempre se conduce con firme confianza, sabe del ejército de militantes que operan a su favor, los cuales, parecieran haber tomado cursos de capacitación sobre fraudes electorales, pues cada día se vuelven más profesionales.

Además tienen todo el sistema político a su favor, comprado y manipulado. Todas operando total y absolutamente a su favor –IFE, Trife, etc.- las cuales tienen como fundamental tarea de echar abajo cualquier denuncia interpuesta por parte de sus adversarios políticos y garantizar el triunfo de sus candidatos. Por ello podemos observar que en la legislaturas tanto de la Cámara Alta y Baja, la “caballada” priísta es absoluta y arrasadora para cualquier iniciativa –sea a favor o en contra- que les pongan. Si viene de sus “patrones” –presidente de la República y gobernadores- las aprueban sin leerlas siquiera y si proceden de otro partido político, simplemente votan en contra, por buena que sea la iniciativa.

El cinismo, es parte de los requisitos para ocupar un puesto político. Estos pueden asesinar –ex alcaldesa de Alvarado, Sara Herrera-, robar a manos llenas, cometer un ecocidio, explotar los recursos naturales con fines personales, enriquecerse ilícitamente, ordenar golpear a ciudadanos, periodistas, manifestantes, cometer fraudes, coludirse con la delincuencia organizada, gastar sin limitación –viajes, residencias, aviones, coches, “comilonas”- el dinero de los ciudadanos, etc. Absolutamente nada les será cuestionado y jamás tocarán la cárcel.

Cuando termina una administración tanto de presidentes de la República, gobernadores, alcaldes u otros puestos de importancia para un gabinete, jamás el titular entrante, cuestionará el fraude cometido por su antecesor. El convenio político es realizado por inercia entre el gobernante saliente y el entrante. Jamás se le exigirá, pues quien inicia el gobierno de un estado o municipio, pretenderá el mismo trato en su salida, y por lo tanto, sea mucho o poco lo que robe en su gobierno, esto jamás será expuesto a la luz pública, mucho menos sancionado.

El dinero y el amor -argumentan muchos- es uno de los dos estados que el ser humano jamás puede ocultar, mucho menos disimular. Asumimos dicha tesis como verdadera, cuando observamos las mansiones de aquel quien gozó de un puesto político, cuando lo vemos con sus múltiples empresas, ataviados de joyas y vestidos de lujosas marcas, entonces pensamos, que son verdaderamente unos literales monumentos a la corrupción.

Su estatus fue lograda por la “complicidad” y “benevolencia” de otros actores políticos, es decir, no existe ni existirá –al menos en el estado de Veracruz no hay uno sólo- un individuo enquistado en el poder que verdaderamente esté en él por una convicción de servicio. Su vocación es vivir con lujos, disfrutar de las mieles del poder, de aprovecharse de ello, por lo tanto, quienes pueden frenar este hecho y cambiarlo, son los propios ciudadanos. Esperemos algún día así sea.

Quejas y comentarios:

fueradefoco@agnveracruz.com.mx
fueradefoco67@gmail.com

Twitter:
@AGNVeracruz

Visita www.agnveracruz.com.mx

Periodismo puntual y con sentido