Hallan en Tamiahua una pieza de estilo totonaca asociada al juego de pelota
+Se localizó a través de un salvamento arqueológico un yugo totonaco labrado en piedra, un aditamento que solían utilizar los jugadores de pelota
Zona Norte
Proceso.com.mx - 2018-07-06
La Huasteca alta de Veracruz volcó su atención al municipio de Tamiahua, poblado de poco más de 5 mil habitantes, en donde se localizó a través de un salvamento arqueológico un yugo totonaco labrado en piedra, un aditamento que solían utilizar los jugadores de pelota para golpear la bola con mayor seguridad, y también comúnmente usados durante rituales, con una antigüedad entre el 200 y 650 d.C.
Sobre la pieza, el arqueólogo Gabino López Arenas, coordinador del proyecto de salvamento en la obra del Gasoducto Sur de Texas-Tuxpan, precisó que se trata de un objeto tallado en granito, de 40.5 centímetros de largo, 37 de ancho y 10 centímetros de espesor, y fue descubierta el pasado 19 de abril por sus colegas Octavio Castañeda, Rubén Abasolo y Salvador Pérez.
El yugo “presenta bajorrelieves con forma de grecas en sus caras externas y superior, y una cabeza de serpiente y un cascabel en sus lados. Sus dos remates tienen labradas cabezas humanas que miran en sentido opuesto, y su curvatura externa tiene un rostro con rasgos felinos”, informó López Arenas.
Lo más curioso del hallazgo es que la pieza no está asociada a ninguna arquitectura monumental u ofrenda, y permaneció bajo un terreno cercano al municipio de Tamiahua, en Veracruz. “Una teoría es que su colocación pudo deberse a su proximidad a la laguna de Tamiahua.”, según dio a conocer el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
La pieza representaría a un “ofidio” totonaco, y su antigüedad oscila entre los periodos Preclásico (350 a.C. a 200 d.C.) y Clásico (200 a 650 d. C.), y fue encontrada en el sitio denominado Estero Milpillas.
“Allí hubo un asentamiento continuo del cual no queda arquitectura porque tal vez eran casas de materiales perecederos. Así, basados en fuentes documentales que asocian los yugos no sólo a juegos de pelota sino también a pedimentos o tributos a fuentes de agua, podríamos explicar su hallazgo, dado que en el sitio hay muchas hondonadas que en temporada de lluvia se convierten en arroyos. Sin embargo, no tenemos elementos suficientes para determinar su función original”, dijo López Arenas.
Cabe mencionar que Tamiahua se encuentra a cinco kilómetros del sitio arqueológico El Tajín, donde se tiene conocimiento de 11 juegos de pelota, lo que ha hecho pensar a especialistas que esta ciudad del Clásico tardío tuvo la práctica del juego de pelota como un ritual único asociado a la fertilidad de la tierra.
Al detallar sobre las labores de salvamento, el arqueólogo explicó que el proyecto inició en enero de 2017, durante la exploración del Gasoducto Sur de Texas-Tuxpan, de 760 kilómetros de largo y 25 metros de ancho; de éstos 73 kilómetros son terrestres y 687 son marinos, en este último se descartaron pecios (restos prehispánicos sumergidos), mientras que en tierra se hicieron pozos de sondeo y se ubicaron 41 sitios: uno cerca de Altamira, Tamaulipas, y el resto en Veracruz, en donde se encontraron restos cerámicos, líticos, humanos (seis en los poblados de El Frijolillo, La Antena y El Tronconal, en tanto que en La Loma, San Luis y El Progreso se localizaron tres entierros semicompletos) y restos animales.
López Arenas comentó que si bien el “yugo totonaca” y el entierro de El Progreso son los elementos más destacados, se busca contactar a expertos, como la bióloga Alicia Blanco, para indagar los restos animales (que incluyen conchas de moluscos), que ayudaría a conocer más sobre hábitos de consumo y vida de los antiguos agricultores y pescadores que poblaron Altamira y el norte de Veracruz.