OFICIO: TRAIDOR

Pasillos del Poder César Augusto Vázquez Chagoya Leanos en www.pasillosdelpoder.com www.enlaceveracruz212.com.mx vazquezchagoya@prodigy.net.mx 4 de DICIEMBRE de 2012

César Augusto Vázquez Chagoya

Pasillos del Poder

2012-12-07

Cabizbajo. Sin salida política aparente porque deja de ser protegido de dos ex presidentes de la república panistas que no sólo le dieron dinero a manos llenas, sino que caminó con impunidad. Este invierno, Miguel Ángel Yunes Linares regresa a su viejo juego de atacar a los gobernadores y políticos que le estorban y que tantos resultados le ha dado.

Se pensaba que andaba de huida a raíz de los escandalosos fraudes en el ISSSTE, donde fue director del 2006 a febrero de 2010, cuando se vino de candidato al gobierno de Veracruz por el PAN de manera legal, porque de hecho el presidente Felipe Calderón lo volvió su alfil en Veracruz para desestabilizar a los gobiernos priístas.

Los números no mienten. En los primeros dos años en el ISSSTE, Yunes se la pasó en Veracruz; según su página de Internet, tuvo 59 visitas a nuestro estado y una sola a Ciudad Victoria, Tamaulipas. En Veracruz hay 350 mil derechohabientes, pero a nivel nacional existen más de 10 millones.

Claro que ninguna reforma al ISSSTE podría salir de la crisis como se nos hizo creer, sino al contrario: se llenó de contratos amañados y fraude en el TURISSSTE, FOVISSSTE, etc., en compañía de amigos, familiares, amante y familiar.

A raíz de los escándalos de fraude en el ISSSTE, al término del gobierno de Felipe Calderón y la exhibición de sus casas en el estero de Boca del Río (con costo de más de 80 millones de pesos) Miguel Ángel salió a la luz pública para reproducir lo que es su lógica política de atacar al mandatario no sólo para estar vigente en el ánimo político, sino para apoderarse del PAN estatal.

Viejo su proceder: en 1980 sale huyendo del estado cuando siendo diputado local, ataca al gobernador Agustín Acosta Lagunes por meter a la cárcel a sus amigos Francisco López Lara, ex director de Patrimonio del Estado y José Luis Lobato Campos, ex director del Instituto de Pensiones del Estado, por supuestos desvíos de recursos.

En 1982, Yunes Linares es oficial mayor de la Cámara de Diputados para seguir atacando a Don Agustín y perseguir con pistola en mano al diputado federal por Coatzacoalcos, Carlos Brito Gómez, quien fuera subsecretario de Gobierno con Rafael Hernández Ochoa y principal obstáculo político de Miguel Ángel en ese sexenio.

Con Humberto Lugo Gil, en 1986, se fue a la Dirección de Aeropuertos y Servicios Auxiliares; ahí Yunes Linares se olvida un poco la política y se dedica a hacer dinero con los aeropuertos. Llegaron los yates a su vida y le empezaron a gustar las niñas, junto a un grupo de políticos y pederastas profesionales.

En 1988, Yunes Linares vuelve a la violencia por conveniencia. Ataca sin misericordia al que hacía poco era su hermano, casi gemelo, Fidel Herrera Beltrán, encargado de la FOHAPO de la Secretaria de Desarrollo Urbano y Ecología (SEDUE) donde era titular Patricio Chirinos Calero. Con su violencia logra sacar a Fidel de la Secretaría de donde saldría el próximo gobernador de Veracruz.

De 1992 al 97 fue la historia más negra de Veracruz, cuando Miguel Ángel Yunes Linares fue secretario de Gobierno y no sólo persiguió a líderes sociales, líderes del PRD, sino que matan indígenas, ganaderos y fue el peor ataque a los medios de comunicación.

En ese periodo, con tal de ganarse la gubernatura y habiéndose acabado el término legal para reclamar el estado de Veracruz adeudos o delitos, en 1996, Yunes mete a la cárcel al ex gobernador Dante Delgado con la complicidad del presidente del tribunal Julio Patiño Rodríguez, por un fraude de cerca de 400 millones de pesos. Un amparo saca a Dante de la cárcel.

En 1997, Yunes Linares pierde más de 107 alcaldías siendo presidente del PRI y entra en confrontación con Patricio Chirinos porque --sin trabajo-- andaba diciendo que era “asesor del gobernador”. Chirinos sólo le manda con el contador Blas Freyre Cantón un sobre con 35 mil pesos a Miguel como su paga de “asesor”, que rechaza el choleño, porque adujo que era un mal entendido.

Peleado con la clase política veracruzana, Yunes se refugia con Diódoro Carrasco en la Secretaría de Gobernación y de ahí se hace cargo de las cárceles federales, cuando se da la fuga del narcotraficante Joaquín Guzmán (El Chapo). Otro escándalo impune.

Como ahora, en el 2001, Miguel Ángel Yunes Linares, sin que un perro le ladrara, se le acerca al gobernador Miguel Alemán. Viera usted las fotos abrazados de los políticos estatales de la época hasta que Alemán Velasco lo hace diputado federal plurinominal. Siendo presidente del PRI nacional, Roberto Madrazo lo hace director del jurídico del partido.

Como es su naturaleza, Yunes se alía con Elba Esther Gordillo, quien a la vez se pelea con Madrazo y éstos se salen del PRI no sin antes pagarle el favor al gobernador Miguel Alemán: atacándolo de indolente, ratero y otras lindezas. Yunes traiciona al PRI y se cobija como empleado con el PAN.

Como subsecretario de Seguridad Pública, Yunes se volvió hacer cargo de las cárceles federales. En los primeros dos años del gobierno de Fidel Herrera Beltrán, se lo pasó “picándolo”, hasta que sucedieron los hechos de Villarín donde matan a ZETA-14 y Yunes saca a sus policías recomendados del puerto de Veracruz.

Sin ser nadie como ahora. Ni candidato ni funcionario, en el 2011 de repente sale Miguel Ángel Yunes atacando a su protectora: la líder nacional de los maestros, Elba Esther Gordillo, acusándola que le había pedido 20 millones de pesos mensuales para el PANAL cuando fue director del ISSSTE.

Ahora, sin ser funcionario, sin ser nadie más que un miembro adherente del PAN, sin la protección presidencial ni dinero, éste que empezó como delincuente y ahora forma parte del crimen organizado de la gasolina, sale en estos días atacando al gobernador de Veracruz, Javier Duarte de Ochoa.

Traidor por tradición, con tal de estar en los medios de comunicación, Yunes, ni sus hijos, van atacar a nadie del gobierno de Veracruz sino sólo al gobernador.

Desde que tomó posesión del cargo Duarte, la familia Yunes se la pasó hablando lindezas del mandatario, pero ahora lo atacan con todo porque necesitan foro.

No sabemos porqué se hace caso a los dichos de un don nadie, quien inventa lo que quiere y sigue impune. En estos años en las traiciones de Yunes tiene que ver mucho el finado Juan Camilo Mouriño. A ver qué viene.