LOS GUERRILLEROS MAGISTERIALES FRUSTRADOS

El gobierno federal no pudo con la CNTE, tanto que siguen bloqueando avenidas de la Ciudad de México. La CNTE ganó el pago de dos meses en Oaxaca, así como bono de inicio del ciclo escolar, impunidad en los daños en la capital del país y representación en 22 estados cuando sólo lo tenían en Chiapas, Oaxaca y Michoacán.

El gobierno federal no pudo con la CNTE y aventó el problema a los estados, siendo la corona que la Coordinadora tenga injerencia en la educación en Veracruz.

Tal vez por su juventud y haciendo cuentas con sus ahorros, el gobernador de Veracruz, Javier Duarte de Ochoa sacó la cara y le mandó un ultimátum a los profesores que no estén en clases: se les aplicará la ley.

Esto originó que docentes bloquearan carreteras en todo el estado. Las regiones de Orizaba, Xalapa, Veracruz, Acayucan, Minatitlán y Coatzacoalcos se volvieron campos de batalla de los maestros disidentes contra el gobierno estatal.

Otros, la gran mayoría, bajo protesta abrieron las escuelas este 10 de octubre y ya sabe: otros se dedicaron a bloquear carreteras como reto al gobierno del estado porque con la Federación no se cuenta; ésta, con más dinero y poder, no ha podido quitar el plantón ante el Monumento a la Revolución en México.

La Reforma Educativa no es perfecta, pero adoleció que la Federación desde diciembre pasado no tuvo la capacidad de comunicarse con los maestros y ciudadanía anunciando lo que venía. La Federación creyó que trataba con cualquier sector productivo, cuando éste era especial y más que nada porque educan al futuro del país, que son los niños.

Los educadores veracruzanos tuvieron todos los diálogos y la tolerancia de su gobierno, mientras muchos criticábamos la pasividad ante los delitos contra otros veracruzanos. Unos se volvieron extremistas y siguen con su violencia. Los más conscientes en estos momentos, abren escuelas dando clases bajo protesta. La gran mayoría va a seguir luchando, pero dando clases.

Antes que la Federación lo pensara y aventara la bolita, ya el gobernador Duarte de Ochoa les decía a los maestros disidentes que se necesitaba adecuar la Ley Federal a la Ley Educativa Estatal y nadie lo escuchó, más que un grupo de maestros que sus compañeros le empezaron a decir “vendidos”, pero el tiempo les dio la razón.

En los tiempos modernos después de la expropiación petrolera, lo más sobresaliente en materia educativa fue la creación de los libros de texto gratuitos, así como hacer extensiva la educación gratuita desde preescolar hasta enseñanza media, y esta gran reforma educativa en el 2012.

La Federación dejó pasar su momento histórico y ahora toca a los estados como Veracruz el sacar la cara. Lo primero es que los maestros regresen a clases y después las reuniones en la Legislatura para reformar la Ley Estatal (y si es necesario, reformar la Constitución).

Este proceso llevará casi 10 años. Hay sindicatos que tendrán nuevos rostros; muchos líderes morirán y otros se transformarán. La lucha magisterial, para algunos, ni comienza y ya está la violencia caminando ante la más absoluta oscuridad.

Aunque en esto hay un pero: en el conflicto magisterial, en razón de sus razonamientos y mecánicas de negociación, están metidos los grupos guerrilleros donde tienen más influencia. El EPR y el ERPI nos han demostrado su fuerza en Veracruz. Ven un momento propicio de llevar a maestros al clandestinaje y a la desobediencia civil.

Los maestros disidentes, por más bloqueos, no acabarán con Veracruz. Quieren, anhelan, que el gobierno meta la fuerza pública. Quieren su muerto. Una es la contención a la represión.

No quiero ser agorero, pero ya se da en el kilómetro 13.5 en el puerto de Veracruz, donde maestros bloquearon la entrada al puerto pero ya están siendo rehenes de los choferes de los tráileres varados que empiezan agredirlos.

Ahora cada automovilista en las carreteras de Veracruz sabe que son maestros que bloquean. Saben que no se encontrarán con machetes y se aventarán a abrir las carreteras, por lo que desde ahorita los maestros están queriendo responsabilizar al Gobierno de Veracruz de lo que les pueda suceder, pero bien que saben que la violencia la están generando ellos y proviene de la misma ciudadana afectada por las protestas.

Hoy 10 de octubre, la gran mayoría de maestros volvieron a clases y la minoría sigue bloqueando carreteras. A ver si alguien les dice que la lucha en contra de la Reforma Educativa entró en otra fase: la negociación.

Javier Duarte camina ante la historia.