Ex Contralor solapó a funcionarios “constructores”
Arturo Reyes Isidoro
Prosa Aprisa
2013-10-11
La salida del ahora ex Contralor General del Estado, Iván López Fernández, estaba cantada desde agosto pasado. Ante las versiones que ya para entonces corrían en el sentido de que era inminente su salida de la administración pública estatal, el 7 de ese mes, en una comida, el propio gobernador Javier Duarte de Ochoa la confirmó.
“Cumplió su ciclo”, fue la escueta pero contundente respuesta que dio cuando se le preguntó sobre la especie. Lo que llamó la atención fue que contrario a otros miembros del Gobierno a los que se ha reciclado y ahora cumplen otras tareas, al que se fue ayer no le otorgó ninguna posibilidad de seguir en la nómina. No lo mencionó para otro cargo.
Sin embargo, este cuestionado ahora ex funcionario sobrevivió todavía dos meses en el cargo, ante la desesperación de los funcionarios y empleados de la dependencia, que ya no veían la hora de que marchara, pues se creó mala imagen, habrá que saber por qué, aunque sus razones las debe haber.
¿Por qué se dejó pasar tanto tiempo entre la confirmación de que se iba y la fecha en que se ejecutó su cese, disfrazado de renuncia?
La semana pasada, el presidente de la Asociación de Constructores del Estado de Veracruz (ACEVAC), Rafael Nuñez Landa, demandó que las empresas constructoras que incumplieron compromisos con el Gobierno del estado fueran boletinadas y que regresaran los anticipos que se les otorgaron.
Por su parte, el presidente de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (CANACINTRA), Carlos Salvador Abreu Domínguez, pidió a su vez que la Contraloría General del Estado fijara una postura e interviniera en el caso.
Ambos se referían a la denuncia hecha por el titular de la Secretaría de Infraestructura y Obras Públicas (SIOP), Gerardo Buganza Salmerón, de que varias constructoras no cumplieron con la construcción de obras pese a los adelantos económicos que se les dieron, por lo que se les tuvo que rescindir los respectivos contratos y enfrentan denuncias para que devuelvan lo que se llevaron.
Al decir de Nuñez Landa, el daño a las finanzas públicas es por 600 millones de pesos, mientras que Abreu Dominguez dijo que ya era tiempo de que el contralor López Fernández saliera a aclarar el asunto.
Dijeron que no se debía permitir que empresas incumplidas continuaran operando en el estado y desplazando a constructoras locales, “ya que muchas… de otros estados sólo vienen a robar el dinero de los veracruzanos y no realizan las obras en tiempo y forma con la calidad que se requiere”.
La cloaca que destapó Buganza Salmerón puso al descubierto serias irregularidades, que permitió o no quiso ver el Contralor, y quizá a eso se debió que con frecuencia en los últimos días se le viera llegar a la SIOP donde permanecía muchas horas, se puede imaginar que tratando de aclarar o justificar tanto desgarriate de control administrativo. Incluso hay quienes atribuyen que debido a ello no lo dejaban ir.
De acuerdo a la información que va trascendiendo, algo que se puso al descubierto y que solapó López Fernández es que muchas de las constructoras incumplidas ¡están apadrinadas por propios funcionarios del Gobierno!, los que a espaldas del Gobernador han tratado de presionar para que no se actúe y no se rescindan contratos.
Su insistencia hace pensar que o son dueños de las constructoras y tienen prestanombres y han traficado con su influencia, o son socios de las empresas, o éstas son propiedad de sus familiares, o bien reciben “comisiones” por cada obra que logran que le asigne.
Hasta ahora, que se sepa, a todos se les ha parado en seco y se ha dado parte ya, con nombres, pelos y señales, al Gobernador, quien indignado porque traicionaron su confianza y actuaron a sus espaldas, en un golpe de autoridad ordenó proceder sin consideración alguna.
“La Contraloría tiene la tarea fundamental de velar por la administración pública honesta y transparente, vigilante de la gestión pública y de las políticas gubernamentales, así como ejecutar acciones concretas que garanticen la legalidad en la construcción de un gobierno ordenado, eficiente y honesto”, dijo ayer Duarte de Ochoa.
López Fernández no cumplió con esa consigna. El caso de las constructoras incumplidas es la mejor prueba. El ex contralor debiera ser sometido a investigación y llevado a juicio. Por alguna razón, se le dio una salida no vergonzosa y hasta con reconocimiento. De todos modos, el juicio de la sociedad lo condena.
Cena de celebración
Anoche, en la Ciudad de México, la empresa Braskem, filial del consorcio brasileño Odebrecht, y la mexicana Idesa ofrecieron una cena para celebrar el cierre exitoso de las negociaciones para la construcción del proyecto Etileno XXI, que se construye en el sur del estado, el mayor complejo petroquímico en construcción en el continente americano.
Estuvieron presentes personalidades como Roberto Bishoff, Director General de Braskem-Idesa; José Luis Uriegas, Director General de Idesa; Alejandro Martinez Sibaja, Director General de Pemex Gas y Petroquímica Básica; Francisco Salazar, Director General de la Comisión Reguladora de Energía, y en representación del Gobierno de Veracruz, el secretario de Desarrollo Económico y Portuario, Erik Porres Blesa.
En días pasados, el gobernador Javier Duarte de Ochoa y representantes de Odebrecht realizaron una visita de trabajo al Complejo Etileno XXI, donde el Ejecutivo estatal anunció que en los próximos meses Veracruz recibirá inversiones superiores a los 5 mil millones de dólares para el desarrollo de un clúster petroquímico en aquella zona, en beneficio de miles de familias veracruzanas.
Por su parte, el consorcio brasileño Odebrecht anunció que realizará en el país su mayor inversión en el mundo por 8 mil 100 millones de dólares, el 80 por ciento de la cual se concentrará en el estado, donde a través de su filial Braskem y la mexicana Idesa ya invierten 3 mil 500 millones para la construcción del mencionado complejo.
La significación y relevancia de la cena de anoche es que quedó disponible y abierta la citada cantidad, por lo que miles de empleos directos e indirectos durante la construcción de la obra y cuando esté lista la factoría están asegurados, lo que es buena noticia para los paisanos del sur.