DEJAR ATRÁS LAS ELECCIONES Y PONERSE A GOBERNAR

A dos semanas de las elecciones, conocidos ya los resultados, los triunfos y derrotas relativas que definieron un nuevo balance del poder político, el acotamiento al presidente de la República en la cámara de diputados, en alcaldías y representantes en la ciudad de México, así como la expansión del partido Morena en los Estados que disputaron gubernaturas y su consolidación en otros como Veracruz, López Obrador y su grupo no han pasado la hoja y siguen en la delectación de sus victorias y la justificación del voto de castigo recibido, donde lo hubo.

Incorregible López Obrador, feliz e irónico con sus triunfos electorales, se pavonea cada día como jefe de partido ratificado y denosta a nuevos blancos- la clase media aspiracionista y manipulable que lo rechazó- e insiste en su discurso polarizador , fustiga a los conservadores que desearon frenarlo, persiste en su actuación facciosa como mandatario.

Eso sí, a los suyos los defiende a capa y espada. Pese al peritaje que señala fallas estructurales en el colapso de la linea 12 del metro de la Ciudad de México y probables omisiones de mantenimiento y supervisión, mete las manos al fuego por Marcelo Ebrard- en cuyo gobierno se realizó- por el constructor Carlos Slim, y por Claudia Sheinbaum, actual jefa de gobierno. Presume a Hugo López Gatell como servidor público ejemplar, no obstante que México es de los países peor rankeados en el manejo de la pandemia, y exonera a Manuel Barttlet de las investigaciones que dicen revividas en USA de un viejo crimen de un agente de la DEA asesinado en México cuando aquel era Secretario de Gobernación.

En el Estado todavía este sábado en la visita de López Obrador a Martínez de la Torre, Cuitláhuac García, el fantasma de gobernador, instalado desde que llegó en la inercia, atenido a los programas sociales del gobierno federal y a las fuerzas armadas, imitando el sketch de su jefe cacareaba que “Veracruz dio un portazo a quienes querían regresar a la corrupción”, una frase hecha que ignora la pluralidad con que se votó en Veracruz.

Es hora de dejar atrás el conflicto político y ponerse a dar resultados de gobierno. Los problemas fundamentales del país y del estado- la economía, el empleo, la pobreza, la inseguridad, entre otros, han empeorado durante su gestión, y los surgidos en su periodo, como la pandemia del coronavirus, no tienen para cuándo resolverlos.

No hay políticas de desarrollo viables. La visión económica de López Obrador no atrae la inversión por falta de certidumbre y obstrucción a la libre competencia; sus grandes proyectos- el aeropuerto Santa Lucia, la refinería dos Bocas y el tren Maya, además de onerosos, no se ven viables, la restauración de los monopolios en energía- CFE Pemex, suenan obsoletos en la era actual, y los subsidios para programas sociales solo son paliativos a la pobreza. El financiamiento a los programas y proyectos prioritarios, en barril sin fondo, llega a sus límites. La militarización, no ha contenido la criminalidad y ha vuelto mil usos a las fuerzas armadas. El combate a la corrupción es solo discurso, pura lengua, salvo los casos selectivos contra enemigos políticos.

Ya chole con las elecciones y los enemigos políticos de su ” Cuarta Transformación “. Es hora de ponerse a trabajar con eficacia. López Obrador y la 4T son mucho circo y poco Pan. El problema es que sus políticas equivocadas no ofrecen salida. Con el pais en ruinas no se justifica su ánimo jubiloso.

¿ Podrá hacerse algo, desde el contrapeso relativo de la oposición y los grupos de presión ?

EL ENTUERTO DE PASO LARGO Y EL DESCUBRIMIENTO DE LOS BACHES
Si bien abona al mito del omnipresente líder populista que atiende directamente los problemas a nivel comunidad, la intervención del presidente López Obrador para negociar con los habitantes de Paso Largo en Martínez de la Torre su consentimiento a que se construya un tramo de la autopista Cardel- Poza Rica, apunta a la ineficacia de la Administración Pública Federal y del Estado.

Significa que toda la cadena de mando de SCT y del gobierno del estado fueron incapaces de generar la solución. ¿ En verdad era necesario que interviniera el presidente de la república ? Asombra el nivel de incompetencia.

Los habitantes de esa comunidad pararon las obras de la constructora Mota- Engil, por cierto, de las favoritas de Peña Nieto y también de López Obrador, por temor a que las obras causaran inundaciones a su comunidad. No se sabe si se evitara esa contingencia, pero por lo pronto, obtuvieron el consentimiento comunitario a cambio de obras hidráulicas y programas sociales. Esperemos que no los hayan engatusado para rescatar la obra. Si López Obrador consintió inundar a las comunidades de Tabasco para desfogar las presas hidroeléctricas, no extrañaría el sacrificio de Paso Largo.

Una ventaja colateral de la visita del Presidente es que instruyó la rehabilitación carretera de la zona; será que ahora tiene una nueva mirada, vio con nuevos ojos los caminos y ¡Oh! descubrió que está llena de baches.

RUIZ SALDAÑA, CACHIRUL, POR LA TANGENTE
El consejero del INE, totalmente Morena, que aspira a ser rector de la UV, sin cumplir con los requisitos de elegibilidad, José Roberto Ruiz Saldaña, temerario, sigue en campaña.

Luego de su destape en video mensaje, este sábado acudió a un café del puerto de Veracruz donde acompañado de algunos universitarios de bajo calibre dio una conferencia de prensa en la que se erigió en el ” nuevo líder que requiere la UV”.

Sin embargo su principal problema es que no acredita que es elegible al cargo de Rector. Con audacia, asume que si cumple los requisitos, pero su respuesta es evasiva a la demostración, le aplica la frase salirse por peteneras, o por la tangente, trata de desviar la objeción, al lugar donde se ha realizado la actividad docente o de investigación, cuando el cuestionamiento para él es en cuanto a la temporalidad inexcusable de cinco años.

En su curriculum público, Ruiz Saldaña no registra ni un año de actividades docentes o de investigación. Por lo tanto, no cumple el artículo 37 fracción III de la Ley Orgánica de la UV, el cual dispone que para ser rector se requiere ” Tener cuando menos cinco años de servicio docente, de investigación o difusión de la cultura y extensión de los servicios, preferentemente en la Universidad Veracruzana”. El adverbio ” preferentemente” aplica a la frase Universidad Veracruzana, pero no excusa la antigüedad de cinco años, que es una condición categórica, no opcional.

Hasta ahora Ruiz Saldaña no ha hecho públicos sus documentos probatorios, sí como dice entrará al debate y refutará a los que han puesto en duda su elegibilidad, junto con su argumentación debería transparentar sus documentos de prueba.

¿ Pensará Ruiz Saldaña que la Junta de Gobierno le concederá en los oscurito su pase como cachirul?