SIN ÁRBOLES, LA NATURALEZA MATA

Pese a que todos los días atentamos en contra de nuestros ecosistemas y hacemos negocios con nuestros árboles, cada día la naturaleza nos cobra vidas por los deslaves. Ahora en este año, a mitad de la temporada de lluvias, hay muertos en Veracruz por todas partes y asombrosas las muertes en Coscomatepec, Yecuatla y Altotonga que llegan a docenas.

El agua siempre ha tenido memoria y es por eso que antes podíamos en Minatitlán estar hasta tres meses bajo vigorosos aguaceros. Todavía me toco acompañar al dirigente del PRI estatal Ángel Leodegario Gutiérrez, al Uxpanapa, donde tenían 4 meses bajo la lluvia, en 1984.

Los deslaves y cortes de carreteras sólo se veían en esos tiempos, porque para hacer los sistemas de comunicación se tuvo que afectar manantiales y pasos naturales del agua, y es por eso que lo primero que se dañan son los caminos y se trabaja todos los días en drenajes pluviales y se limpian las carreteras para que no se corten, pero así sucede.

Lo más grave, es que en el Cofre de Perote llegaron hasta hacer un ferrocarril los taladores para llevar los árboles a los aserradores bajo la complacencia de las autoridades estatales y federales. José Yunes Turbay hizo su fortuna así por los años cincuenta.

En la actualidad, todas nuestras sierras donde existen bastiones arbolados, son controladas por grupos armados que amedrenta a los campesinos, llevándose sus árboles a los aserraderos, y todos los policías y soldados conocen. Con ser parques nacionales o no, les importa poco a los talamontes llegar hasta llevarse los árboles en donde anidan las mariposas monarcas en Michoacán.

Aparte de hacer una Reforma Educativa en el país para quitarle el control a los sindicatos y lo vuelva a tomar el estado, debemos preguntarnos qué mundo le vamos a heredar a nuestros hijos, cuando tenemos más de 250 ríos en Veracruz y no hayamos encontrado programas para que los niños adopten un árbol en las zonas urbanas y rurales.

Vemos que cada año, la Comisión Nacional Forestal (CONAFOR) nos hace el anuncio de que van a reforestar en Veracruz, pero ya son 100 anuncios que hacen y no vemos ni dinero, ni árboles. En Xico Viejo, a sólo 7 kilómetros de la cabecera municipal, se le reclamaba al de la CONAFOR porqué el agua había llegado a una piedra que nunca se inundaba y hasta había una cabaña.

La respuesta del funcionario federal era que existían “muchos árboles arriba” y por eso se daba ese fenómeno.

La contestación no es así: hay menos árboles, porque éstos retienen el agua de las lluvias y agarran su cauce natural; si hubiera muchos árboles como señalaba, no vendría el agua en demasía y con piedras, y esto quiere decir que no hay nada que los detenga.

Entonces el funcionario de CONAFOR les echó la culpa a los campesinos porque cada año su dependencia les daba árboles y dinero para que sembraran y los cuidaran, pero estos en vez de sembrarlos, los enterraban y en cada supervisión se “mochaban” con el supervisor de CONAFOR, quien levantaba actas aseverando que los sembraban y cuidaban.

Queremos saber que el gobierno anticorrupción de Enrique Peña Nieto, empieza después de poner orden en la educación o al mismo tiempo se audite a fondo a CONAFOR. Dicen que hay más árboles y tenemos más derrumbes.

Pero la cosa no para ahí. Por sembrar árboles, organismos internacionales o personas donan dinero a las organizaciones mexicanas para que siembren y cuiden los árboles. No necesita ir muy lejos: aquí en Xalapa a varias organizaciones que son ecologista. Los vemos dando conferencias y hasta salen fotografiados en anuncios panorámicos, pero nunca vemos fotos sembrando tan siquiera un árbol y menos cuidarlo.

Hay organizaciones, familias e instituciones que son un ejemplo del manejo responsable de los bosques. Ahí está el ayuntamiento de Coatepec, la familia Chedraui en el sur de Veracruz, la familia Fernández, la familia de Don Rafael Hernández Ochoa, allá en Vega de Alatorre, etc.

Si alguien asevera que estas lluvias son “atípicas” en Veracruz, se equivoca. Siempre ha llovido así por las enormes cuencas de agua que tenemos y poseíamos hermosas selvas y bosques que desgraciadamente ya no existen.

Los derrumbes de casas con familia adentro, claro que el reblandecimiento de la tierra se está dando que por la desforestación, porque la tierra no tiene donde agarrarse.

Veracruz ha estado en estado de emergencia, pero los hermanos de Acapulco están como presos. La autopista no está bloqueada por maestros, sino que hay muchos deslaves. El aeropuerto de este lugar esta inundado.

Las clases se suspenden, porque si bien el huracán pegó cerca de la zona norte, nuestros ríos en todo el estado están subiendo de nivel y Javier Duarte no quiere más sorpresas. Suerte

Ya no debemos quejarnos del cambio climático. Sabemos el mal en Veracruz y se debe trabajar aprisa en reforestar y no darle solo la responsabilidad a CONAFOR, que sólo es una cueva de bandidos oficiales.