VIENE LA VERDADERA TORMENTA

Cuando usted lea la próxima semana, exactamente el 4 de julio, tendremos casi 14 horas de la veda electoral que empieza a las 24:00 horas del día 3 de julio. De los candidatos que se postularon, ganarán sólo los que trabajaron tienen varios meses. Sería raro que se llevara el triunfo los que tomaron la medida del Instituto Electoral Veracruzano en sólo un mes de campaña.

De lo que se ha visto en un mes, en el estado, se viven unas contiendas electorales calientes como somos los jarochos. Sólo se salió de la gobernabilidad el municipio de Coxquihui, que hace tres años se repitieron las elecciones por los conflictos que nacen por el transporte, pero sobre todo tienen más años la lucha entre los malosos por el poder en ese municipio, porque colinda con el estado de Puebla.

La quema de los carros del PAN en Tierra Blanca es un asunto pendiente, con las mismas características de Coxquihui, porque sea quien sea el gobernador o presidente de la república, la violencia ha sido la distinción de la “Novia del Sol” (por el calor que hace).

Imagínese que desde los tiempos de Marco Antonio Muñoz Turnbull como gobernador en 1950, ya se tenía que recurrir a darle el mando policiaco al más malo del pueblo para mantener la tranquilidad. Teniendo cerca el estado de Oaxaca, de aquí nacen las quemas de casas con niños adentro y las llamadas guerrillas delincuenciales de “La Picuda” y "Tomasín”.

Parece mentira que a pesar del tiempo, las venganzas personales por familias quemadas siguen y ahora se suma la inmensa inmigración de los centroamericanos a Tierra Blanca, que es un centro ferroviario. No hay varita mágica para detener a los pistoleros o delincuentes quienes se refugian alternamente entre el estado de Veracruz y Oaxaca.

Lo que pasa en la sierra del Totonacapan (donde se ubica Coxquihui) está descompuesto desde que asesinaran en Puebla a Venustiano Carranza en 1920; y en Coyutla haya sido la aprehensión de su asesino Rodolfo Herrera por el general Lázaro Cárdenas. Sólo tenemos en el sur otra zona de conflicto que es Tierra Blanca, hasta ahora.

En los demás municipios existen jaloneos por el poder municipal. Los partidos recurren a la guerra blanca y sucia. Nadie se salva. No conozco a ningún dirigente estatal o nacional de los partidos que puedan parar la guerra electoral. Lo único cierto, es que ya el PRI en ningún municipio va solo. Ya hay un partido enfrente del tricolor y eso es un avance político en la entidad.

En estos momentos están en el ojo del huracán los integrantes del Instituto Electoral Veracruzanos por sus errores. Antes de 1995, cuando se crea el IEV y las elecciones la manejaba el secretario general de gobierno, el PRI llegó al descaro de hacer sus planillas en la Sala de Banderas del Palacio de Gobierno y hasta ahí iban los partidos de oposición a pedir las cuotas de votación.

Como sea, esto ya no pasa, y con todos los errores, en 18 años, hay en Veracruz una democracia imperfecta, pero en vías de mejorar. Es el momento de pensar en darle una buena mejoría al IEV y al Tribunal Estatal Electoral, porque ya están desgastados ante la ciudadanía.

Ya sabemos que el próximo 7 de julio al atardecer, van empezar los jaloneos como en cada elección municipal. Los funcionarios de las casillas con los representantes de los partidos políticos van contar y recontar. La gente rodeando donde se cuenta en la casilla y --como es la pasión-- se agreden entre ellos, por lo que vamos a ver a los policías corriendo de un lado a otro a pedir calma.

Se calcula que un 0.5% haya jaloneo, pero al final se ponen de acuerdo y se coloca en el estrado o la pared, las actas de los ganadores de las elecciones. Si no se ponen de acuerdo, el conteo se va a la sede distrital o al comité central del IEV en Xalapa.

Lo que nunca vamos a estar de acuerdo, es que empezara una guerra a nivel estatal regateando triunfos y señalando derrotas, quedando como delincuentes los funcionarios de casillas y los representantes de los partidos en ellas.

Para empezar, los que hacen las leyes del IEV son los diputados que están integrados por los partidos políticos en la Legislatura de Veracruz. El IEV es el árbitro electoral donde están todos los representantes de partidos, quienes siguiendo las directrices de sus dirigentes estatales, van a atacar. El lunes 8 de julio, amaneceremos con una guerra periodística y verbal entre los partidos políticos.

Los ciudadanos en todo el estado, condenados en Xalapa por los partidos políticos por no saber contar y no ocultar el mal proceder de los candidatos. Los ciudadanos de las casillas, tienen que dejar cosas de hacer para darlos a su comunidad. Claro que saben contar con los representantes de los partidos, que sí reciben pago para su comida.

La guerra sucia entre partidos en Xalapa será motivado por el conteo en las casillas. Se criminaliza a los ciudadanos en las casillas que saben contar y van gratis. Nada les dan, pero cómo se van a dar hasta con la cubeta los partidos políticos, reales responsables de lo bueno y malo de la elección del 7 de julio.

Por eso, cada día que hay elecciones estatales y federales, la ciudadanía ya no quiere ser integrantes de las casillas. En el nombre de esta ciudadanía que cumplen con un deber cívico, se ha paralizado en el 2006 la avenida Reforma de la ciudad de México por meses. Todos los partidos, aparte que tiene deuda con esta ciudadanía, no le bajan a su guerra, en busca de prebendas que no ganaron en las casillas.

Una semana de campañas. Ahora si viene la verdadera tormenta. A ver con qué nos salen ahora los partidos políticos este 8 de julio. Que ganen los mejores.