GANÓ EL MIEDO; CUIDADO CON IFE DISTRITALES

César Augusto Vázquez Chagoya Leanos en www.pasillosdelpoder.com www.enlaceveracruz212.com.mx vazquezchagoya@prodigy.net.mx 3 de JULIO de 2012

César Augusto Vázquez Chagoya

Pasillos del Poder

2012-07-04

Muchos dicen que la votación del 1 de julio con un 62% en todo el país fue histórica y que nunca se había votado así. Nos equivocamos, la votación más alta de nuestra historia fue la de 1994, cuando se elegido a Ernesto Zedillo como presidente, donde votó el 77% del padrón electoral. Ambas elecciones, copiosas, tienen un factor común: miedo a la violencia.

En 1994 veníamos con el asesinato del Cardenal de Guadalajara Juan José Posadas Ocampo; el levantamiento armado de los Zapatistas en Chiapas; el magnicidio del candidato presidencial del PRI, Luis Donaldo Colosio y la muerte de Francisco Ruiz Massieu, secretario general del PRI nacional. La ciudadanía salió a votar en masa ante el miedo de perder la tranquilidad, respaldando al PRI.

En el 2000 el PRI pierde la Presidencia de la república por un “hartazgo de la población” como la bautizara Carlos Monsivais, quien supo retratar el momento, dándole la confianza de cambio de régimen al PAN con Vicente Fox.

En la elección presidencial del 2006, sin desmantelar el sistema del PRI, la población respalda la continuidad del PAN con una votación estrecha con el PRD de Andrés Manuel López Obrador, con un conflicto electoral que lleva al tabasqueño a bloquear la avenida Reforma de la Ciudad de México, declarándose presidente legítimo de México y llamando a Felipe Calderón “el espurio”.

El día 1 de diciembre del 2006, Felipe Calderón con la ayuda del PRI, toma posesión ante el Congreso de la Unión, entrando por la puerta de atrás. Desde que empezó este sexenio, el presidente Calderón tuvo desencuentros políticos con casi todos los importantes actores políticos del país, e inicia una guerra contra el narcotráfico, sin plan, ni estrategia.

En el 2009, a raíz que el PRI gana gubernaturas y el Congreso con mayoría relativa, tanto a Calderón y Andrés Manuel se les quita lo peleoneros en el 2010, juntándose el PRD con el PAN para disputarle 10 gubernaturas al PRI, ganándole Oaxaca, Puebla y Sinaloa. Las siete restantes fueron para el tricolor, entre ellas el estado de Veracruz.

Teniendo los priístas 18 gubernaturas, la violencia en el país es imparable, con el Ejército y la Marina en las calles, protegiéndose el grupo del narcotraficante Joaquín “El Chapo” Guzmán Loera, atacando a sus enemigos asentados principalmente en los estados del Golfo de México. El programa de Oportunidades funciona como nunca a favor del PAN.

Aunque ahora se quiera decir que el presidente Felipe Calderón es un demócrata y no se metió en el proceso electoral de este año, sus actos demuestran lo contrario: se apoderó del PAN expulsando a Manuel Espino, ex dirigente nacional, por no estar de acuerdo con él; catea la casa del presidente Fox por andar diciendo que el PAN iba a perder la elección presidencial.
En todos los estados echó a andar el programa de oportunidades a favor del PAN. En Veracruz, ponen como encargado de oportunidades a Miguel Ángel Yunes Márquez, hijo del ex candidato perdedor a la gubernatura en el 2010.

Metió a la cárcel a 31 alcaldes de Michoacán, dizques ligados con los narcos, pero salieron libres y al juez que llevó la causa lo acusaron de proteger al crimen. Calderón quería que su hermana ganara la gubernatura, pero no pudo. Anduvo amagando a políticos del PRI en meterlos a la cárcel y tampoco logró nada.

En el periodo presidencial, Felipe Calderón andaba en campaña. Bajo de tono su discurso, pero ya traía sus negativos con 60 mil muertos, 10 mil desaparecidos y 160 mil desplazados en la guerra contra el narco. Casos Fox, Espino y persecución de priístas. El programa Oportunidades hasta se daba en las oficinas del PAN, etc.

En la elección del 1 de julio de este año, salió la realidad: la población se volcó a quienes habían canalizado la inconformidad nacional contra el PAN. Sólo la votación del PRD y el PRI, con 15 millones y 18 millones respectivamente, son 33 millones de votos en contra del PAN, contra 12 millones que lo apoyaron.

El programa Oportunidades no les funcionó más que en Veracruz parcialmente. En la mayoría de los casos, los beneficios a la población se lo dieron a connotados panistas, que se quedaron con el dinero y no pudieron llevar votantes a las urnas, pero ahora son millonarios.

Se dice que en Veracruz, el programa Oportunidades funciono parcialmente, porque los números no corresponden a la votación del PAN en la presidencial del 2006. En ese año, el PRI sólo gano 6 distritos electorales de 21. Pierde las dos senadurías y la elección presidencial.

Ahora, el PRI gana 15 diputaciones de las 21.Triunfa en la presidencial y las dos senadurías. La familia Yunes Márquez sólo logró con el programa Oportunidades que Fernando Yunes Márquez obtuviera el tercer lugar en el Senado.

En los 6 distritos perdidos por el PRI son justificados. Los dos distritos de Veracruz urbano y rural, porque la gente esta contenta con el actuar de la Marina que se hizo cargo de la policía y bajaron la imparable violencia desde el 2007. Gana el PAN.

El distrito de Huatusco, el PAN gana por el hartazgo contra la familia del senador Rafael Ochoa Guzmán, ex dirigente del SNTE nacional. Los distritos de Córdoba y Cosamaloapan, con malos candidatos, pierden ante los azules.

Xalapa urbano, el PRI pierde con un pésimo candidato, que queda en tercer lugar. Gana el PRD, con 70 mil votos, con un segundo lugar del PAN con 43 mil votos, siendo la candidata de Poza Rica. Hay que destacar que Xalapa es un foco de oposición al gobierno.

La diferencia entre la elección presidencial del 2006 y la del 1 de julio, es que desde el 2000 perdía los distritos del norte del estado que ahora recupera en su totalidad. El sur de Veracruz es priísta, en el 2006 se pintó de amarillo, pero ahora se ratifica tricolor.

Las dos senadurías con Héctor Yunes Landa y José Yunes Zorrilla las gana el PRI. Entonces Oportunidades funcionó a nivel estatal parcialmente y a nivel nacional fue un desastre, porque de los 6 estados donde se elegían gobernadores, el PAN sólo ratifica su triunfo en Guanajuato. El mismo partido pierde Jalisco y Morelos.

Como hace 6 años, el PRD vuelve a crucificar a 3 millones de ciudadanos, quienes de manera gratis recibieron la votación de los mexicanos, al mencionar fraude en las casillas. Nosotros habíamos mencionado que el fraude no se haría en las casillas, por lo bien vigiladas que estaban, sino que se haría por el voto duro del PRI, con sus sindicatos, y del PAN con el programa de oportunidades.

Es claro que la ciudadanía voto por el PRI, seguros que volverá la tranquilidad en la república y es la prioridad nacional, porque si no hay seguridad, no hay productividad y menos en todas las actividades humanas.

En cuanto a la protesta del PRD, las cosas son diferentes que hace 6 años: AMLO perdió frente a Calderón por 400 mil votos. Ahora AMLO pierde ante Peña Nieto por más de 3 millones de votos, además que el Distrito Federal, que es una ventaja para el PRD, pero también es una desventaja, porque no se cree que Marcelo Ebrard se preste a que haya violencia en su territorio.

Pero este 3 de julio, AMLO anunció que tiene pruebas de anomalías en 113 mil casillas de las 143 mil, y este miércoles 4 pedirán la revisión estricta de la votación. Puede que población, simpatizantes del tabasqueño, rodeen las sedes de los 300 distritos electorales en toda la república, que puede llevar a enfrentamientos. Cuidado.

Andrés Manuel López Obrador debe entender que 15 millones de ciudadanos quieren que sea presidente, pero los que votaron por el PRI, PAN y Nueva Alianza, lo rechazan. No sólo valen los votos de AMLO, contados por la misma gente, quienes contaron los votos de otros partidos, donde más de 32 millones de mexicanos no lo quieren de presidente.

Que no haya otra elección por el miedo ciudadano. Doble misión del PRI en traernos la paz.