OPERACIÓN “VACUNA” ENTRE YUNES Y AMPUDIA

Pasillos del Poder César Augusto Vázquez Chagoya Leanos en www.pasillosdelpoder.com www.enlaceveracruz212.com.mx vazquezchagoya@prodigy.net.mx 20 de JULIO de 2012

César Augusto Vázquez Chagoya

Pasillos del Poder

2012-07-24

El domingo 22 de julio vino a Veracruz el dirigente nacional del PRI, Pedro Joaquín Coldwell, a decir que el gobernador Javier Duarte de Ochoa sí sabe gobernar. Es un buen administrador como lo conocemos todos, por lo que no hay explicación para que desde la cúpula nacional del tricolor se le esté mermando en el poder.

Los dos años de Javier Duarte de Ochoa han sido muy difíciles. El primero en presionarlo fue el presidente Felipe Calderón, porque por un lado los militares alaban al mandatario por su lucha contra el narcotráfico, y por otra el presidente a nivel nacional nos pone como territorio dominado por los narcotraficantes.

En estos momentos, el gobernador se encuentra entre varios fuegos, no sólo políticos, sino de índole social. Se enfrenta a una gran deuda, no hay dinero y todos reclaman el cumplimiento de las obligaciones como estado, pero como dice el secretario de Finanzas, Tomás Ruiz, la federación disminuyó el flujo de participaciones federales hacia Veracruz por varios meses.

Podemos entender que Felipe Calderón haya presionado a lo máximo para que su partido el PAN ganará la Presidencia en la entidad, tercera en votación nominal, pero no se puede entender que desde el PRI, específicamente los “hidalguenses”, se apoderen del corazón del gobierno de Veracruz con un traidor.

En materia electoral, Javier Duarte cumplió en demasía en recuperar 15 distritos de los 21, las dos senadurías y aportar para el triunfo de Peña Nieto más de un millón doscientos mil votos. Javier Duarte no es un pelele para que en el PRI lo traten como si hubiera perdido su partido.

Es el gobernador de un estado rico en todo y la entidad más poblada después del Estado de México y el Distrito Federal. En la historia de Veracruz, nadie le ha ganado a un gobernador y como se dice en el pueblo: "Un gobernador, es un gobernador".

El grupo de los “Hidalguenses”, conformado por Miguel Osorio Chong, Jesús Murillo Karam y Humberto Lugo Gil, ex gobernadores los tres, con la anuencia de Enrique Peña Nieto, nos mandan otro hidalguense como subsecretario de Gobierno que, según sus palabras, vendrá a “poner orden”.

Por palabras del hidalguense, entonces en Veracruz hay desorden y necesitábamos un político que sirvió de forma violenta contra los veracruzanos en el sexenio de Patricio Chirinos con homicidios, secuestros, agresiones a periodistas, tráfico de influencias, mentiras, etc., y lo teníamos que traer otra vez para que nos trajera la “Paz Yunista”.

La “Paz Yunista” consistió en que nadie se podía manifestar en las calles; los magistrados del Tribunal de Justicia si no obedecían, se metían a sus casas y los amenazaban con su familia; se metieron contra todo periodista crítico; quitaron notarías por ser opositores dentro del PRI; mataron a indígenas, etc.

El "hidalguense” que hoy es subsecretario de Gobierno, desde 1992 hasta la fecha, sigue estando bajo las órdenes del que ha querido ser gobernador de Veracruz en tres ocasiones y ha fracasado, llamado Miguel Ángel Yunes Linares, originario de Soledad de Doblado, con una vida llena de traiciones.

Miguel Ángel Yunes Linares fue empleado y amigo del grupo de los hidalguenses que hoy se encuentran cerca del ganador de la Presidencia de la República, Enrique Peña Nieto.

Yunes, como se fue al PAN, quiere regresar al PRI porque no puede vivir sin la protección presidencial sea del color que sea.

Tiene en su haber (donde siempre lo ha acompañado por cerca de 30 años Ampudia Mello) los desfalcos a lo que era la Dirección de Aeropuertos y Servicios Auxiliares, donde junto con Lugo Gil dejaron que el otro jarocho, Alfredo Hakim Aburto, tuviera dinero para construir terminales aéreas, pero no las hizo y se peló con los recursos.

Trae encima la grave acusación de la pederastia con Jean Succar Kuri en Cancún. La muerte de la luchadora social xalapeña, quien documenta casos de pederastia de Yunes, Libertad Hernández Landa; el desfalco al ISSSTE; pero lo que más le pesa es la traición a la maestra Elba Esther Gordillo, quien ha prometido que lo meterá a la cárcel por el desfalco al ISSSTE, donde también Ampudia era secretario técnico y aprobaba los contratos, etc.

Yunes necesita ahora de los priistas a quienes traicionó y vuelve a su antiguo grupo dentro del PRI: Los Hidalguenses, para seguir gozando de impunidad y arregla con ellos la llegada de Enrique Ampudia Mello a la Subsecretaría de Gobierno de Veracruz. La cosa no iba a ser fácil y crearon entre ambos "El Plan Vacuna" para engañar al gobernador y a la ciudadanía veracruzana.

Para que haya una aseveración, debe haber bases para decir que mienten. Pareciera cosa de ficción pero no lo es. En el gobierno de Patricio Chirinos, Yunes y Ampudia crearon una Secretaría de Gobernación “chiquita”, compuesta de aparatos de última generación para clasificar información, de espionaje y reacción.

En este equipo estaban buenos analistas políticos, pero por otra parte tenían a su disposición a "rateros", los que se metían a las casas de funcionarios; homicidas como los hermanos Rodríguez Franco; golpeadores profesionales, etc.

En ese tiempo había un cerebro principal de las computadoras que tenía sólo tres terminales. Una del gobernador Patricio Chirinos; otra para Miguel Ángel Yunes, secretario de Gobierno y la tercera para Enrique Ampudia. En el sexenio 1992 al 98, sólo tres personajes engañaban al gobernador o creían que lo hacían

Yunes, Juan Herrera Marín y Enrique Ampudia Melo: el filósofo y creador de los trabajos sucios. La política está basada en la vida de las personas. A todo enemigo de Yunes se le creaban sus historias para que las viera Chirinos cuando consultara la base de datos.

Ampudia creaba notas en contra de los adversarios de Yunes y las publicaban en periódicos o revistas “maiceados”. Por ejemplo, un día le sacaban a fulano de tal que se había emborrachado, echado tiros y que le pegó a su mujer; otras notas decían que los periodistas José Pablo Robles Martínez, Ángel Leodegario Gutiérrez y Raymundo Jiménez conspiraban en contra del gobernador.

Inventaban que el senador Miguel Alemán se reunía con los adversarios a Chirinos; que Sebastián Guzmán Cabrera o Heliodoro Merlín Alor, dirigente de la ganadera del sur, se reunían en secreto con Alemán o con Gustavo Carvajal, y después le secuestraron a los hijos de ambos, escondiéndolos en las mazmorras del cuartel de San José en Xalapa, donde nadie los buscaba.

A Sebastián Guzmán Cabrera, quien era líder petrolero, le quitaron 10 millones de dólares. Heliodoro recurrió a Miguel Alemán, quien presionó tanto que tuvieron que soltar al hijo. Así se hicieron historias de terror en la base de datos.

Bueno, hasta inventaron una entrevista al líder Alejandro Hernández Dolores, a quien atacaban de guerrillero, para justificar la muerte de grandes ganaderos de la Huasteca para quitarles sus tierras.

En fin, hay muchas historias de mentiras que ellos crearon y el cerebro de esto era el hidalguense Enrique Ampudia Mello; con el transcurrir de los días las daremos a conocer.

Por eso cuando a Enrique Ampudia lo nombran subsecretario de Gobierno, se tenía que “vacunar” de Yunes, pero tenía que ser en las condiciones que ellos controlaban. Son muy dados a crear operaciones con claves entre sí.

1.- Tenía que ser publicada la “vacuna” en el diario que es vocero de Yunes Linares y de sus hijos, y este es el NOTIVER del puerto de Veracruz, también llamada “Base Cuarenta” por los narcotraficantes, porque de ahí se atacaba al Ejército y a la Marina. Lleva este periódico 6 muertos.

2.- Un diario a modo era el escenario para publicar cuando Ampudia le dice a Yunes que no sabe porqué lo nombraron y se pone a sus órdenes. Claro que ambos sabían que era una grabación y el único que se los publicaría sería NOTIVER.

3.- Entre sus mentiras, Ampudia publica en el mismo diario una replica y se “ofende” porque Miguel le grabó la conversación privada entre ambos y que desde ahí en adelante lo contara como uno de sus múltiples adversarios. Si no tenía NOTIVER la anuencia de Yunes de publicar la réplica, no lo haría, pero lo hizo porque era un juego de “vacunarse”.

Lo grave de esto es que nuestro flamante “hidalguense” no sabe que grabar es un delito federal y no vemos que demande a su jefe, amigo y a quien lo hizo millonario: Yunes Linares. ¿Por qué no le demuestra algo de lealtad al gobernador Duarte?

4.- Miguel le contesta a Enrique (claro, en el NOTIVER, el también amigo de las mentiras) donde el “choleño” no baja al hidalguense de empleado y que no está con él, porque ya no le da trabajo, y otras lindezas.

5.- Ampudia dice que la llamada a Yunes y la carta aclaratoria no tienen que ver con su nuevo cargo, por lo que no le pidió permiso al gobernador: se equivoca Don Enrique, porque desde que asumió el cargo, la llamada a Yunes tenía que consultarla y su replica también. No es un asunto privado y fue su primera traición al gobernador Javier Duarte de Ochoa, de las otras que vendrán.

6.- Hay una duda que carcome. Yunes y Ampudia han caminado más de 25 años juntos: no se puede considerar traición al PRI si se convierte Ampudia, el hidalguense, en funcionario del gobierno de Fox y de Vicente Calderón, porque hay tanto funcionarios del PRI o sin partido en la función pública federal y estatal.

Sólo queremos saber cómo se le llama a que Enrique se venga a Veracruz, donde nada lo liga, a coordinar la campaña a la gubernatura por el PAN en el 2010, en contra del PRI, diciéndose priista desde 1986, siendo el candidato por el partido azul Miguel Ángel Yunes Linares. ¿Esto no es traición en contra del PRI y Duarte? ¿O qué es?

Dicen unos políticos que Ampudia no es un peligro para el gobierno de Duarte, porque no es lo mismo como cuando fue director de Gobernación con Patricio Chirinos, ya que no manejará dinero ni la policía.

Cierto, pero que tal que tiene a su mando las oficinas regionales por donde se nutre de información el gobierno de Veracruz y conocerá de otros eventos confidenciales que no salen en los periódicos y que dicha información desde ahora la sabe de primera mano Miguel Ángel Yunes Linares, por quien los veracruzanos en su mayoría no votó para que fuera gobernador de nuestro estado.

Ahora estamos bien. Veracruz con una cantera de políticos, nos va a gobernar un hidalguense que no lo liga nada con Veracruz y es cierto como dice Yunes: lo trajo de 1992 al 97 de empleado y se fue con él a México de empleado. La última vez que regresó vino de nuevo de empleado cuando en el 2010 coordinó la campaña del PAN a la gubernatura y se volvió a ir.

¿Por qué el grupo de hidalguenses cercanos a Peña Nieto no lo mandaron a la tierra donde nació Ampudia? Fácil: ahí no hay dinero qué saquear, aparte que ellos andan diciendo que al gobernador Duarte en diciembre se lo van a llevar a México a una Subsecretaría de estado y se quieren apoderar de Veracruz con su aliado Miguel Ángel Yunes Linares.

Los priistas jarochos y la ciudadanía de Veracruz solamente mirando cómo se reparten el estado los buitres de la política. Ese es el nuevo PRI de Peña Nieto, que instaura a partir del primero de diciembre de nuevo la república imperial. Ya ni la burla perdonan.